España cierra el Consulado y el Cervantes de Estambul por «amenaza terrorista»

En el caso del Instituto Cervantes, situado a unos pasos de la emblemática plaza Taksim, se suspenden las clases presenciales, pero se mantiene las clases en línea para los alumnos inscritos en los cursos a distancia.

Estos avisos llegan tras las movilizaciones organizadas en Estambul en señal de protesta por la quema de un Corán hace unos días por parte de un político ultraderechista a las puertas de la Embajada turca en Estocolmo. Las recomendaciones de viaje también se han modificado y desde la legación española en Turquía avisan de que «en vista de los incidentes de quema de coranes en Europa y de la sucesión de presuntos actos terroristas cerca de lugares de culto en diversos países, se recomienda evitar las inmediaciones de los sitios de culto, así como aglomeraciones y lugares muy frecuentados por turistas».

La actividad se suspende en Estambul, pero no en Ankara, donde la Embajada española y la sección consultar mantienen la actividad con normalidad y siguen abiertas al público.

Desde Ankara reaccionaron a estas medidas europeas con una alerta de viaje para sus ciudadanos instándoles a tener precaución si salen del país debido «al peligroso aumento de actos antimusulmanes, xenófobos y racistas». El Ministerio de Exteriores turco emitió un comunicado que recogió la prensa local en el que explicaba que «los acontecimientos reflejan el nivel preocupante de la retórica racista y discriminatoria en Europa y los ciudadanos turcos que planean visitar países donde ocurren tales manifestaciones deben ser cautelosos y abstenerse de visitar áreas con grandes multitudes que apoyan este tipo de ideología».

La quema del libro sagrado ha sido también el motivo clave para que Erdogan decida frenar las conversaciones con Suecia para su ingreso en la OTAN. Los suecos pidieron formar parte de la Alianza Atlántica tras el estallido de la guerra en Ucrania, pero para ello necesitan el apoyo unánime de todos los miembros y, de momento deberán esperar porque Ankara se resiste a dar la luz verde.