Una persona observa el Etna en erupción. Marco Restivo/Reuters

La erupción del Etna obliga a cerrar el aeropuerto de Catania

La actividad del volcán siciliano, que no para de aumentar desde la pasada semana, ha derivado en la emisión de una columna de cenizas que afecta al espacio aéreo

Martes, 23 de julio 2024, 13:58

El volcán Etna es uno de los grandes atractivos de Sicilia pero su última erupción ha complicado el turismo en la isla. El aeropuerto de Catania, que da servicio a la zona oriental, ha quedado este martes cerrado por la presencia de cenizas en el ... espacio aéreo. La suspensión de la actividad afecta a todas las operaciones de llegada y de salida en la terminal Vincenzo Bellini que mueve millones de viajeros cada año. La medida, en plena temporada estival, obligará a cancelar o desviar cientos de vuelos hasta que la situación se normalice.

Publicidad

El aumento de la actividad en el Etna, el volcán activo más grande de Europa, comenzó a percibirse la pasada semana pero en la madrugada de este martes se convirtió en algo más que evidente. Pasadas las 4.00 horas, el cráter conocido como Vorágine del Etna -a unos 3.000 metros de altura sobre el mar- se convirtió en una espectacular fuente de lava. También ha comenzado a desbordarse por el punto conocido como Bocca Nuova. Y no parece que la situación vaya a calmarse en las próximas horas ya que el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) de Italia ha constatado en la zona un aumento de la frecuencia y de la amplitud de los llamados eventos infrasónicos, aquellos que no alcanza el oído humano. Los temblores arrojan valores «muy altos».

El propio INGV ha sido el encargado de emitir una alerta roja para el vuelo ante «la actividad volcánica en curso», catalogada como de «alta intensidad», que ha derivado en la llegada de partículas al espacio aéreo. Inicialmente se detectó una columna de ceniza a unos ocho kilómetros de altura aunque las emisiones se limitaron después a la cima del Etna, que entró por última vez en erupción hace apenas un año. Entonces también hubo que paralizar el aeropuerto de Catania, a donde llegan miles de turistas en verano con este volcán precisamente como uno de los rincones marcados habitualmente en su plan de viaje.

Una enorme columna de humo brota del Etna. Marco Restivo/Reuters

Sobre las propias calles de Catania y otras poblaciones cercanas llueve este martes ceniza. En el aeródromo de la ciudad -la segunda más poblada de Sicilia tras la capital, Palermo- deberán esperar a que pare su emisión, y retirarla después de las infraestructuras aeroportuarias, antes de reanudar la actividad.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta 136 Aniversario!

Publicidad