Una cadena de temblores aviva el miedo a un gran terremoto en Nápoles

El último susto se lo llevaron los habitantes de la zona en la noche de este lunes, cuando se registraron en pocas horas más de 150 sacudidas, siendo la más grande de magnitud 4.4, la más alta jamás registrada desde que comenzó en 2005 la actual crisis bradisísmica, por la que se alza o hunde el nivel del suelo. El epicentro estaba situado a una profundidad de 2,6 kilómetros en la Sulfatara de Pozzuoli, el municipio contiguo a Nápoles donde está ubicado el volcán de los Campos Flegreos.

La cadena de seísmos provocó el pánico entre muchos vecinos, que escaparon de sus casas. Hubo que desalojar temporalmente a 39 familias ante la sospecha de que sus viviendas, situadas cerca del epicentro, hubieran sufrido daños estructurales más allá de los desprendimientos de algunas cornisas que se registraron. Los colegios de la zona se mantuvieron cerrados este martes para verificar que no existe riesgo para los alumnos y el personal docente, aunque se espera que reabran sus puertas este miércoles. También sufrió daños leves la cárcel femenina de Pozzuoli, por lo que fueron trasladadas a otros centros penitenciarios sus 140 reclusas.

El Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), el organismo encargado de controlar la actividad sísmica en Italia y la situación de sus volcanes, está realizando una serie de catas en diversos puntos de los Campos Flegreos para intentar prever si proseguirán los temblores y cuál podría ser su intensidad. «Los análisis del gas muestran un aumento de la temperatura y de la presión del sistema hidrotermal superior», señaló Mauro Di Vito, director del Observatorio Vesubiano, una institución que depende del INGV y que monitorea los volcanes de la zona: Vesubio, Campos Flegreos, Ischia y Stromboli. «Dada la deformación del suelo del área afectada es evidente que nos esperamos otros eventos», explicó Di Vito en declaraciones a la agencia Ansa. «Los temblores han ralentizado su ritmo, pero todavía no han terminado».

La cadena de sacudidas en los Campos Flegreos ha avivado el temor de que se produzca un gran seísmo o una erupción volcánica en Nápoles, una aglomeración urbana donde viven cerca de 3 millones de personas y que cuenta con unas infraestructuras insuficientes, por lo que se producen habituales atascos. «No estamos en esa situación, pero ya hemos elaborado un plan de evacuación detallado», trató de tranquilizar el alcalde de la ciudad partenopea, Gaetano Manfredi.

«Intentemos mantener la serenidad. Debemos convivir con este fenómeno, partiendo de la consideración de que por el momento no hay riesgo de erupción», señaló Manfredi, destacando que se va a instalar un campamento de acogida con capacidad para 200 personas en caso de que resulte necesario evacuar a más vecinos. La primera ministra, Giorgia Meloni, presidirá este miércoles una reunión dedicada a analizar la situación del volcán de los Campos Flegreos.