Tras la reciente ejecución en Irán del ciudadano germano iraní Djamshid Sharmahd, condenado a muerte por terrorismo, el Gobierno federal ha anunciado nuevas sanciones unilaterales contra la república islámica. La ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, comunicó este jueves el cierre inmediato de los tres consulados ... generales que el régimen persa tiene en las ciudades de Fráncfort, Múnich y Hamburgo y la expulsión de los 32 empleados de los mismos, que pierden el permiso de residencia y deben abandonar el país en los próximos días. Solo permanecerá abierta la embajada en Berlín.
Publicidad
Baerbock subrayó que el Ejecutivo federal había «advertido clara y reiteradamente» en el pasado a la república islámica de que la ejecución de Sharmahd tendría «graves consecuencias» y señaló que hace tan solo un mes habló sobre el caso con su colega persa, Abbas Araghchi, en Nueva York. El «asesinato a sangre fría» subraya que «el régimen de injusticia sigue actuando con total brutalidad pese al reciente cambio en su cúpula», dijo la titular de Exteriores en referencia a la elección de un nuevo presidente en aquel país.
La ejecución demuestra que el régimen de los ayatolás «no actúa dentro de la lógica diplomática normal», afirmó Baerbock. La política verde avanzó además que presionará en Bruselas para que la Guardia Revolucionaria de Irán, la unidad paramilitar de élite que protege a la república islámica, pase a engrosar la lista de las organizaciones que son consideradas terroristas por la Unión Europea. Una medida que ya han adoptado otros países occidentales como Estados Unidos y Canadá.
Teherán anunció la ejecución del ciudadano germano-iraní de 69 años el lunes pasado. Había sido condenado en la primavera de 2023 a muerte tras un polémico proceso en el que se le acusó de actividades terroristas. Al parecer, su militancia en el grupo opositor persa en el exilio Tondar (Trueno) fue la causa de su secuestro en Emiratos Árabes Unidos y su traslado por la fuerza a Irán. Sharmahd nació en Teherán, pero emigró con su familia a los 7 años a Alemania y posteriormente a Estados Unidos, donde participó activamente en grupos opositores al régimen islámico.
El Gobierno federal, la familia del condenado y numerosas organizaciones de derechos humanos rechazaron las acusaciones contra Sharmahd y calificaron el caso en su contra de farsa y juicio preparado. No contó en ningún momento con la asistencia de un abogado y el lugar en el que se encontraba preso se mantuvo en secreto hasta el final. Se presume que la confesión que hizo ante cámaras de televisión fue obtenida bajo tortura. El proceso lo dirigió Abolghassem Salawati, conocido como el juez de la muerte y que ha sido sancionado por Estados Unidos y la Unión Europea.
Publicidad
La reacción de Berlín a la ejecución de Sharmahd ha resultado más dura de lo esperado, según analistas de la capital alemana. Hasta ahora el Gobierno federal había ordenado el cierre de los consulados generales de otro país en su territorio como medida de castigo solo en otra ocasión. Tras la invasión de Ucrania en 2021, Berlín decidió clausurar todas las representaciones diplomáticas de Moscú en Alemania con la única excepción de su embajada. El Ministerio federal de Exteriores había citado ya el martes pasado al encargado de negocios de la legación de Irán en la capital germana para expresar su protesta formal tras la ejecución de Sharmahd y ordenado al embajador alemán en Teherán su retorno para consultas indefinidamente.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.