Más de 6.000 personas aisladas tras una avalancha en el norte de Italia

En los tres municipios la actividad se ve bloqueada. Las escuelas permanecerán cerradas, aunque la mayoría de los afectados son turistas ya que en esta zona residen aproximadamente 300 personas. «Tenemos electricidad, tenemos víveres, la tienda del pueblo puede prestar el servicio, tenemos el gasóleo, ahora somos autosuficientes», dijo el alcalde de Gressoney, Alessandro Girod.

El presidente de la Región del Valle de Aosta, Renzo Testolin, ha informado que las condiciones meteorológicas han comenzado a estabilizarse, por lo que las fuertes nevadas cesarán. Desde las localidades bloqueadas se espera volver a la normalidad a lo largo de la semana.

El Valle de Aosta no es el único lugar en Italia donde acecha el mal tiempo. Otras áreas del norte del país se están viendo afectadas por las fuertes nevadas que ocasionan desprendimientos en Vercelli (Piamonte) y Parma (Emilia Romaña). Además las rachas de viento de hasta 180 kilómetros por hora, y el gran oleaje (hasta cinco metros), asola la costa de Liguria, en la frontera con Mónaco.

Protección Civil va a mantener el estado de alerta naranja en el Piamonte y Emilia Romaña, la zona más montañosa en el norte de Italia, por riesgo de aludes, mientras que en alerta amarilla se encuentran Umbría, Lacio, Abruzos, Molise, Campania, Basilicata, Apulia, Calabria y Sicilia.