Los juzgados de Atlanta están rodeados de barricadas. Esta semana se ha prohibido el aparcamiento en toda la zona. La policía patrulla y los cuerpos de élite han tomado posiciones en edificios adyacentes. La ciudad está en tensión. Se espera que el gran jurado, que ... ha escuchado a los testigos de la investigación contra Trump y sus acólitos, sospechosos de haber intentado orquestar el robo de las elecciones, vote su encausamiento esta misma semana, tal vez este martes.
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Para algunos, sería sólo una causa más, la cuarta en cinco meses, pero esta es la que puede dejar al expresidente entre rejas. La primera, abierta en Nueva York a principios de abril, está relacionada con delitos contables por no declarar los pagos a la actriz porno Stormy Daniels. Es, a juicio de los expertos, la más débil. La segunda, abierta por el fiscal especial Jack Smith en Miami, por intentar apropiarse de documentos clasificados y obstruir la labor del FBI para recuperarlos, es un caso sólido de carácter federal cuyo juicio será presidido por una jueza que nombró el propio Trump. Al ser federal, como la que se abrió en Washington hace nueve días por intentar alterar el resultado de las elecciones, caería bajo su jurisdicción si gana la presidencia en noviembre del año que viene.
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El presidente podría intentar algo que nunca se ha hecho, autoperdonarse, pero no podrá librarse de los cargos que presente contra él el estado de Georgia ni Nueva York, al quedar fuera de su jurisdicción. En Georgia, además, ni siquiera el gobernador tiene capacidad para emitir perdones. Eso le corresponde a un comité.
Al frente de esa investigación se encuentra la primera mujer negra elegida para fiscal general del condado de Fulton, Fanny Willis, en la diana de sus insultos. Se ha presentado el caso frente a un gran jurado e interrogado al menos a tres testigos clave que ya habían declarado antes frente a un gran jurado especial, sin capacidad para presentar cargos. Geoff Duncan, que fuese lugarteniente del gobernador republicano Brian Kemp, el senador estatal Jen Jordán. Ambos oyeron personalmente al exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani y abogado de Trump, que podría ser uno de los doce imputados en este caso, mientras que el periodista George Chidi presenció la reunión de falsos electores con que los asesores de Trump intentaban usurpar a los legítimos. Este es, además, el único caso en el que existe una grabación del propio presidente intentando convencer al Secretario de Estado de Georgia Brad Raffensperger para que le «encontrase» lo 10.780 votos que necesitaba para quedar por encima de Joe Biden en ese estado clave que pudo haber dado la vuelta al resultado electoral de 2020. Según las leyes de Georgia el gran jurado tendrá que votar el mismo día que la fiscal termine su presentación.
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