Estados Unidos se congela a 40 grados bajo cero por una 'explosión ártica'

El brote ártico «épico» -como lo han calificado los meteorólogos estadounidenses- que azotará Estados Unidos en las próximas horas convertirá la jornada de este sábado en la más fría vivida en los últimos años en la zona del Atlántico medio. El mercurio marcará valores de entre -30º y -40º, unos 15 grados menos de lo habitual para la época, que ya es una diferencia notable, pero la sensación térmica por las rachas de viento, entre otros factores, será aún menor. En la cumbre del monte Washington, por ejemplo, se prevé que tiriten a -73º (unos -100º en el sistema Fahrenheit). Los expertos advierten de la «potencial mortalidad» de estos registros al rozar la capacidad máxima de resistencia del cuerpo humano a bajas temperaturas. Sin la protección adecuada se podría acabar en hipotermia y las dificultades en el transporte -por carretera y también aéreo- por las condiciones meteorológicas impiden garantizar una atención sanitaria inmediata.

Las autoridades han aconsejado salir de casa sólo si es imprescindible ya que la combinación de fuertes vientos y nieve acumulada sobre el asfalto imposibilitará la visión y viajar será extremadamente peligroso. También han recomendado llenar la despensa con alimentos no perecederos. Dos consejos que a más de uno le han hecho revivir lo ocurrido hace poco más de un mes con la tormenta Elliot. Estados Unidos se enfrentó entonces a la Navidad más fría de las últimas décadas y ahora, cuando no acababa de recuperarse de aquella nevada que dejó decenas de muertos, encara una 'explosión ártica'.

Las alarmas están encendidas con más intensidad en el norte del país, pero en otros rincones no se salvarán tampoco de este frío extremo. En Boston, por ejemplo, llegarán asimismo a 30 grados bajo cero, un registro que no se daba allí desde 2016. El temporal viajará a lo largo de la costa este estadounidense y en muchos puntos acabará, además, de forma abrupta con el ambiente inusualmente cálido que disfrutaron a lo largo de enero, una situación -ese choque repentino entre épocas de calor y de frío- que los expertos relacionan con la crisis climática.

El vórtice de frío que generará este episodio, eso sí, tendrá un recorrido breve. Se espera que el domingo se reduzca la intensidad del temporal y que el lunes al mediodía se den ya temperaturas más normales para este momento del año. La prueba es que, una vez superado este episodio, el pronóstico sitúa al mercurio por encima de 15 grados hasta mitad de la próxima semana.

Y pese al bajón térmico que se experimentará este fin de semana en Estados Unidos, poco o nada tiene que ver esta situación con el ambiente helador que envuelve a Siberia, la región más gélida del mundo. Así lo recordó el meteorólogo norteamericano William J. Karins a través de una red social: «Las temperaturas de menos 30 grados en el norte de Maine lo convertirán en uno de los lugares más fríos del planeta, pero aún muy por detrás del norte de Siberia, que estará cerca de menos 50 grados». En esta localidad rusa han llegado a registrar hasta 71,2 grados bajo cero, un récord a nivel mundial para un lugar poblado.