Detienen al primo del asesino de Uvalde por amenazar con perpetrar otra masacre

Su madre le escuchó hablar por teléfono con alguien a quien le intentaba comprar ilegalmente un rifle AR-15, pero lo que realmente la alarmó lo suficiente como para denunciar a su propio hijo ante la Policía fue cuando Cruz amenazó a su hermana mayor con meterle un tiro en la cabeza mientras esta lo llevaba en el coche. El adolescente, que según la declaración policial de su madre estaba «intoxicado» y en libertad condicional, amenazó con entrar a tiros en el colegio vecino y perpetrar una masacre «como la de su primo», contó esta en comisaría.

No se le escapaban las escalofriantes coincidencias. Antes de montarse en la furgoneta ranchera que estrelló en la cuneta de la escuela Robb, Ramos le pegó un tiro en la cara a su abuela, que ha sobrevivido después de múltiples operaciones. El colegio al que fue a perpetrar la masacre estaba cerca y le era familiar, porque su madre llegó a trabajar en él. Ahora su primo también vive frente a un colegio de primaria. «Y las clases van a comenzar pronto», le dijo amenazador a su hermana.

Al tratarse de un menor, su expediente delictivo está sellado y se desconocen los detalles de los problemas que ha tenido con la ley, pero son suficientes como para estar en libertad condicional. Los policías que investigaron las acusaciones, que él niega, consideraron que estaban fundadas como para detenerle. El juez ha fijado la fianza en 160.000 dólares.

«Dios sabe qué hubiera ocurrido», dijo al 'New York Times' el sargento Moscoso, de la Policía de San Antonio. «La mujer llamó a la policía porque estaba preocupada por lo que su hijo iba a hacer, y gracias a que ella hizo lo correcto ese individuo ha sido detenido».

No es el primer familiar de Ramos detenido por amenazar de muerte a alguien. Su madre, Adriana Martínez, fue detenida en febrero en Oklahoma City por amenazar de muerte al hombre con el que vivía, un discapacitado que dijo a la Policía estar enamorado de ella pero a la vez asustado de lo que pudiera hacerle mientras dormía. En su caso, la fianza fue de apenas mil dólares.

Se desconoce el estado del procedimiento judicial contra Ramos, porque la nefasta actuación policial, que esperó 73 minutos a entrar en la clase, pese a que más de 400 agentes respondieron a la emergencia, ha acaparado tanta atención que la suerte del chico ha perdido interés. De ahí que inspire más fácilmente a sus allegados que a los extraños.

Según un estudio del National Center for Health Research, la cobertura que dan los medios a los tiroteos escolares motivan a otros adolescentes a perpetrar masacres similares de forma proporcional a la atención que reciben en la prensa. La primera gran masacre escolar de EE UU, la del Instituto Columbine en 1999, recibió más exposición mediática en CNN que la muerte de la princesa Diana. Como resultado, en el mes siguiente se registraron 400 incidentes escolares por todo el país.