Biden amonesta a Trump: «Ningún otro presidente se ha inclinado ante un dictador ruso»

«¿Puedes imaginarte a un expresidente de Estados Unidos diciendo eso?», se escandalizó Biden indignado. «Ningún otro presidente de nuestra historia se ha inclinado jamás ante un dictador ruso. Dejadme decir esto tan claro como pueda: Yo nunca lo haré. ¡Por el amor de Dios, es una estupidez! Es una vergüenza. Es peligroso. No es americano».

El discurso, destinado tanto a tranquilizar a los aliados de la OTAN como a presionar a los republicanos de la Cámara Baja, en cuyas manos se encuentra ahora el paquete de ayuda a Ucrania, tenía un tono de fuerza que el aspirante a la reelección necesitaba para este momento crítico de su campana, que también es «un punto de inflexión en la historia».

«A los miembros del Congreso, tenéis que decidir: ¿Vais a levantaros por la libertad u os vais a poner del lado de la tiranía?»

El Senado había pasado toda la noche en la sesión, boicoteado por algunos legisladores, quienes alargaron su derecho de réplica oral para posponer el voto. Finalmente se llevó a cabo a las 5:00 horas de la madrugada y contó con el apoyo de 22 republicanos, lo que arrojó el resultado de 70 -29 a favor de la ley. El portavoz de la Cámara Baja, Mike Johnson, rehén de los extremistas afines a Trump, ha sido amenazado con una moción de censura si lo pone a votación, por lo que considera la ley «muerta antes de nacer».

Planteada ahora esa ausencia por el presidente como un voto de facto en favor del dictador ruso, Biden pone a los legisladores en otra tesitura. «Nuestros adversarios siempre han buscado resquebrajar la alianza (trasatlántica), con la esperanza de que la OTAN se desmorone. Podéis tener claro que todos se han alegrado al oír a Donald Trump», advirtió. «Lo que os puedo decir es que yo no voy a abandonar. Mientras yo sea presidente, si Putin ataca a un aliado de la OTAN defenderé cada pulgada del territorio de la OTAN», prometió.