Irán niega que haya condenado a muerte al futbolista detenido por las protestas

«Falsas noticias sobre la sentencia de muerte de un futbolista iraní», indicó la oficina diplomática luego de que el presidente colombiano, Gustavo Petro, se sumase al clamor mundial e instase a Teherán a «no matar» a Nasr Azadani. La Embajada enmarcó la información de la Fifpro como parte de una «campaña de 'fake news'». «El juicio todavía no se ha llevado a cabo. Por lo tanto, la noticia sobre la pena de muerte es pura mentira», dijo la legación al precisar que el deportista es el quinto acusado en una causa penal por presuntamente militar en un grupo armado que habría matado a tiros a tres agentes.

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La Fifpro, sin embargo, había detallado el día 13 que Nasr Azadani, que ha jugado en prestigiosos clubes iraníes como el Rah-Ahan, el Tractor y el Gol-e Rayhan, había sido sentenciado a la pena capital «después de hacer campaña por los derechos de las mujeres y las libertades básicas» durante las protestas que se suceden en el país desde septiembre. En concreto, indicaron que había sido hallado culpable del delito 'enemistad con Dios', que conlleva la horca, una pena que ya sufrieron otros dos jóvenes a principios de mes. El último de ellos fue ajusticiado en público en Mashad al ser parte de las movilizaciones que estallaron tras la muerte de Mahsa Amini a manos de la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo.

El desmentido sobre la condena a Nasr Azadani coincidió con el encuentro en Jordania del Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, con el ministro de Exteriores iraní, Hosein Amirabdolahian. «Subrayé la necesidad de parar inmediatamente el apoyo militar a Rusia y la represión interna », señaló el jefe de la diplomacia comunitaria. De igual modo, avanzó que ambas partes han acordado dialogar para «restaurar el acuerdo nuclear».

Paralelamente, el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, acusó a EE UU de ser «cómplice» del atentado perpetrado en noviembre por el Estado Islámico contra un mausoleo de Shiraz, que dejó trece muertos. «El Gobierno estadounidense es un asqueroso mentiroso por izar la bandera de los derechos humanos mientras crea peligrosos grupos terroristas», denunció.