Casi el 90% de los habitantes de una provincia china se ha contagiado de covid

China sufre un repunte de contagios después de poner fin a años de confinamientos, cuarentenas y pruebas masivas que golpearon la economía y provocaron protestas. Además, Pekín levantó el domingo la cuarentena obligatoria para quienes llegan del exterior y reabrió su frontera con la ciudad semiautónoma sureña de Hong Kong. Se teme que los contagios se disparen cuando China celebre a fines de enero el Año Nuevo Lunar, porque millones de personas viajan desde las ciudades a visitar a sus familiares en el interior.

Según datos oficiales, la semana pasada 120.000 personas fueron contagiadas y 30 han perdido la vida desde el levantamiento de las restricciones a inicios de diciembre. Pekín modificó los criterios para definir cuando alguien murió de Covid-19 y suprimió las pruebas obligatorias, con lo que se teme que sus cifras no reflejan la magnitud real del brote.

De cualquier manera, China anunció el lunes que se prepara para una «nueva fase» en su batalla contra la pandemia. «¡La vida avanza de nuevo!», escribió el periódico oficial del Partido Comunista 'El Diario del Pueblo' en un editorial que elogia las políticas gubernamentales contra el virus, que, según él, habían pasado de «prevenir la infección a prevenir la enfermedad grave». «Hoy, el virus es débil. Nosotros somos más fuertes», resumió.

La agencia estatal china de noticias Xinhua, por su parte, destacó la experiencia en la prevención del virus, el desarrollo de la epidemia y el aumento de los niveles de vacunación. Los máximos responsables sanitarios chinos y los medios de comunicación estatales asimismo informaron en repetidas ocasiones que las infecciones por covid están alcanzando su punto álgido en todo el país, aunque restan importancia a la amenaza que ahora supone la enfermedad.

Esto contrasta fuertemente con el régimen anterior de estrictas cuarentenas y confinamientos mientras China catalogaba el virus como una enfermedad de «categoría A», como la peste bubónica y el cólera. La gestión china del covid se rebajó técnicamente a la «categoría B» el domingo, aunque muchas restricciones se suprimieron durante semanas.