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T. Nieva
Domingo, 8 de diciembre 2024, 17:59
El líder del gobernante Partido del Poder del Pueblo (PPP), Han Dong Hoon, en una declaración conjunta con el primer ministro de Corea del Sur, Han Duck Soo, insistió ayer en que el presidente del país, Yoon Suk-yeol, «debe dimitir de su cargo» por ... decretar la ley marcial, una medida que fue revocada posteriormente por el Parlamento.
El jefe del PPP aseguró que esta crisis institucional se resolverá de «manera estable» y que prevalecerá «la democracia liberal» mientras el Gobierno prepara «la pronta dimisión» del presidente. «Incluso antes de su renuncia, Yoon no se involucrará en los asuntos estatales, incluida la diplomacia», aseguró para tranquilizar a la ciudadanía, que se ha manifestado estos días de forma masiva para exigir la destitución del máximo mandatario.
El PPP y al actual Ejecutivo no están solos en la pugna con Yoon Suk-yeol. El principal partido de la oposición anunció que intentará de nuevo destituir al presidente el 14 de diciembre. Su líder, Lee Jae-Myung, defiende que «debe renunciar de inmediato o ser acusado sin demora».
Ya han comenzado las bajas en el Ejecutivo. Primero fue detenido el ministro de Defensa, Kim Yong Hyu, y ayer el titular del Interior, Lee Sang-min, presentó su renuncia por la declaración fallida de la ley marcial. Lee reconoce su «responsabilidad por no servir bien a la ciudadanía y al presidente», afirmó el diario 'JoongAng Ilbo'. Yoon Suk Yeol aceptó su renuncia. Ahora, es el presidente el objetivo. Pese a salvar el sábado una moción de censura y pedir disculpas, tiene las horas contadas al frente del país.
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