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zIGOR ALDAMA
Shanghái
Viernes, 24 de abril 2020, 10:11
Corea del Sur, uno de los países que mejor ha gestionado la epidemia del coronavirus, no ha registrado hoy ningún fallecimiento por la COVID-19. Es la primera vez en un mes que nadie pierde la vida por el SARS-CoV-2 y el segundo ... día consecutivo con menos de diez nuevos contagios: concretamente, seis. Así, el total de infectados en el país queda en 10.708, de los cuales solo 240 han muerto. La tasa de mortalidad se mantiene de esta manera en 2,24%, pero se dispara hasta el 23,5% entre los ciudadanos de más de 80 años.
«Tenemos que ser conscientes de que todavía quedan pacientes en estado crítico», ha advertido Jeong Eun-kyeong, director del Centro para el Control de Enfermedades de Corea, en declaraciones a la agencia Yonhap. El Gobierno no quiere correr riesgos y ha anunciado que no relajará las medidas de confinamiento para aquellos que deben observar una cuarentena estricta, y a los que impondrá una pulsera de geolocalización en caso de que se la salten. No en vano, con estos confinamientos selectivos Corea del Sur ha logrado mantener al coronavirus a raya sin haber detenido la actividad económica. Actualmente, cuenta con una tasa de contagios de 209 por millón, menos de la mitad que España.
Sin duda, son buenas noticias que dan confianza a la hermana capitalista de Corea. Por eso, Seúl ha anunciado que la liga de fútbol profesional comenzará la temporada el próximo 8 de mayo, con dos meses y medio de retraso. Eso sí, los primeros partidos se jugarán a puerta cerrada para evitar el contagio de la afición, y no hay fecha aún para el levantamiento de esa restricción, que se suma a una batería de medidas de seguridad para evitar que los jugadores y la prensa se infecten.
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A pesar de la buena gestión realizada hasta ahora, Corea del Sur no se ha librado de un gran batacazo económico. Concretamente, durante el primer trimestre del año, su PIB ha caído un 1,4% con respecto a los tres meses anteriores, lo cual supone el peor dato desde el que registró durante el último trimestre de 2008, cuando la economía mundial se vio afectada por la crisis que estalló en Estados Unidos. Según los datos oficiales ofrecidos ayer, el peor dato fue el del consumo interno, que se desplomó un 6,4%.
Las exportaciones, clave también para el país, se redujeron un 2%. Pero lo peor parece que está por llegar, ya que en los primeros 20 días de abril esa variable cayó un 27% en tasa anualizada. «La economía se contraerá un trimestre más debido a las dificultades de las exportaciones», afirmó a Reuters el economista Moon Jung-hui, de KB Bank. «Todo depende del comportamiento de la demanda global y del consumo interno», añadió en rueda de prensa el director general del Banco Central de Corea, Park Yang-su.
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