Corea del Sur refuerza las restricciones para combatir los rebrotes

Los rebrotes se multiplican: al de las discotecas se han sumado otros en un centro logístico que ha provocado ya casi 150 infectados, un centro de ping-pong, varias iglesias de pequeño tamaño, e incluso un centro de día para ancianos, en el que se han contagiado 14 personas. Por eso, las Autoridades han tomado la decisión de extender de forma indefinida las medidas de contención que deberían haber llegado a su fin este domingo. Estarán en vigor en Seúl hasta que el número de nuevos contagios sea inferior a diez. «Si no caen a un solo dígito, contemplaremos la posibilidad de ir un paso más allá y retomar medidas de distanciamiento estricto», ha anunciado el ministro de Sanidad, Park Neung-hoo.

Además, el Gobierno también ha anunciado la obligatoriedad de utilizar una aplicación móvil de rastreo que utiliza códigos QR para identificar a las personas que acceden a diferentes establecimientos, como bares o gimnasios. El objetivo es evitar lo que sucedió en el barrio de Itaewon, donde muchos de quienes acudieron a las discotecas proporcionaron datos falsos en los registros instalados a la entrada. Eso dificultó su rastreo para realizarles las pruebas y determinar si estuvieron infectados. Ahora, como se hace también en algunos lugares de China, pionera en el uso de este tipo de tecnología, será mucho más sencillo saber quién puede haberse infectado en cualquier nuevo foco.

Según el Centro de Control de Enfermedades, en torno al 30% de quienes contraen el coronavirus son asintomáticos, y, aunque la Organización Mundial de la Salud ha afirmado que su capacidad para contagiar a otras personas parece muy limitada, su existencia preocupa a las autoridades de todo el mundo. A pesar de ello, las escuelas surcoreanas continuarán abiertas. «No ha habido contagios en centros educativos. Aunque algunos alumnos contrajeron el virus en otros lugares, no han provocado cadenas de transmisión secundarias», ha afirmado Park en una de las pocas notas positivas del día.