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Nada de lo que sucedió el pasado miércoles en el aula magna de la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas se había visto en los últimos once años en Venezuela. Fue un importante ensayo de democracia en un país que lleva más de dos décadas ... silenciado por las leyes del chavismo. Tres mujeres y cinco hombres hablaron de Nicolás Maduro sin que les importara el riesgo que corrían. Lo hicieron ante un público que aplaudió todas sus intervenciones y que acabó pidiendo «unidad, unidad, unidad» como la fórmula para acabar con la dictadura. Entre los candidatos hubo discrepancias, pero fueron más los puntos en común, como la urgencia de un cambio político.
Ninguno de los ocho protagonistas en este día histórico escatimó adjetivos contra el hombre que desde 2013 ostenta el poder. Una situación difícil de imaginar en un gobierno que inhabilita, persigue y encarcela a sus adversarios. Lo llamaron «dictador», «autoritario», «tirano criminal», «saqueador», «separador de familias», «usurpador». No mostraron temor y prometieron luchar hasta el final.
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Dagoberto Escorcia
Alzaron su voz los candidatos que participarán en las elecciones primarias de la oposición el próximo 22 de octubre. Siempre y cuando Maduro las permita. De momento no ha surgido ninguna reacción del Palacio de Miraflores más allá de la inhabilitación de María Corina Machado, la candidata que domina en las encuestas y acapara el apoyo internacional.
Uno de los moderadores, el periodista Luis Carlos Díaz, que hace unos años fue detenido y encarcelado por el régimen, comentó al principio del debate, que fue retransmitido en YouTube: «Sabemos el peligro que corren por ser opositores y desafiar al poder. Esto no es algo poético».
María Corina Machado (Vente Venezuela), Delsa Solórzano (Encuentro Ciudadano), Tamara Adrián (Unidos por la Dignidad), Andrés Caleca (Movimiento por Venezuela), Carlos Prosperi (Acción Democrática), Freddy Superlano (Voluntad Popular), Andrés Velázquez (La Causa R) y César Pérez Vivas (Partido Centro Democrático) dicen llevar pensando muchos años cómo cambiar la situación política en Venezuela. Entienden que tienen un enemigo en común y un gran desafío en el que la lucha se centra no solo en las elecciones sino en reconstruir el país, recuperar los derechos, reunificar a los casi siete millones de exiliados y excarcelar a los 300 presos políticos.
El último debate público databa de febrero de 2012, cuando estaba en juego el rival de Hugo Chávez. Entonces ganó el derecho a disputarle la presidencia Henrique Capriles, que esta vez no quiso participar, enzarzado en una batalla dialéctica con Maduro en las redes sociales. Aparte de Capriles (Primero Justicia), que sí será candidato en las primarias, otros cinco aspirantes eludieron la invitación.
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Dagoberto Escorcia
El ejercicio democrático encontró las mayores fricciones al abordarse la posibilidad de que el régimen inhabilite candidatos o no acepte la elección de los ciudadanos. María Corina Machado y Freddy Superlano, también vetado tras ganar la gobernación de Barinas se opusieron a establecer un orden de sucesión, en caso de que el vencedor de las primarias también resulte apartado de la lucha por la presidencia en 2024.
«Yo no juego con las reglas de la tiranía», señaló María Corina. «Tras ganar unas elecciones fui inhabilitado y comenzó una lucha en Barinas. Lo principal es consolidar el liderazgo con la gente. Puede que hoy estemos dando el primer paso», aseguró, por su parte, Superlano.
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