Nicaragua quieren controlar a las personas que reciban ingresos desde el extranjero

La denominada Ley de Agentes Extranjeros buscaría tener registro de toda persona nacional o jurídica que reciba dinero «directa o indirectamente» de otros gobiernos o de entidades y organizaciones privadas no nacionales. Y si alguien se niega a inscribirse será sancionado, al punto de que podrían confiscar todos sus bienes así como prohibir sus actividades en el país.

Según dicta el proyecto, el objetivo es establecer un «marco jurídico de regulación» a todos los empleados «que respondan a intereses y financiamiento externo, y utilicen dicho financiamiento para realizar actividades que deriven en injerencia de Gobiernos u organizaciones extranjeras en los asuntos internos de Nicaragua, poniendo en riesgo la seguridad del Estado«.

Varias voces advierten que dicha propuesta es un arma para censurar la libertad de expresión, pues el texto no contempla ninguna excepción para los periodistas nicaragüenses que trabajan para agencias de noticias y medios foráneos. Tampoco queda claro cómo se verán afectados los comunicadores que informen sobre las problemáticas internas una vez que se declaren «agentes extranjeros» pese a ser nacionales ante el Gobierno.

Para la oposición la iniciativa de ley es «aberrante, confiscatoria e inconstitucional», además de «falsa porque lo que trata en el fondo es de reprimir a opositores nicaragüenses«. Según el director ejecutivo de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, Juan Sebastián Chamorro, es »un nuevo zarpazo contra las libertades públicas«. «La dictadura va a aprobar una ley que establece controles» en contra de todos los que se registren como agentes externos con el riesgo de «perder sus libertades civiles o políticas».

La iniciativa fue presentada este martes ante la Asamblea Nacional, cuya directiva es controlada por los sandinistas, a algo más de un año de las elecciones presidenciales de noviembre de 2021, en las que Daniel Ortega, que suma ya 13 años el poder, buscará renovar su mandato.