Ecuador se enfrenta a su peor sequía en más de seis décadas y desde el martes lucha, además, contra una cadena de incendios forestales en este complicado escenario. Con origen en la zona rural de Quito, las llamas se extendían el miércoles ya por el ... núcleo urbano, cubierto por una enorme nube de humo cargada con partículas de ceniza y tomado por casi 2.000 efectivos del ejército, la Policía Nacional y el cuerpo de bomberos y media docena de helicópteros para sofocar el fuego. «Estamos en proceso de liquidación», aseguró esperanzado el alcalde de la capital ecuatoriana, Pábel Muñoz, antes de pedir «no bajar la guardia, ni los brazos». Tres focos continuaban activos.
Publicidad
El fuego mostraba este miércoles su peor cara en la parte alta del cerro Auqui y en el parque Metropolitano, con varias áreas residenciales amenazadas por las llamas. Algunas viviendas no lograron salvarse y acabaron calcinadas. Rosana Cepeda, vecina del barrio de Guápulo, uno de los más afectados, era el vivo retrato de la desesperación: «No pudimos rescatar nada, recién llegamos. No atinamos qué hacer, es algo desesperante». Hasta 107 familias tuvieron que ser evacuadas de sus hogares en Quito, donde los incendios han causado al menos seis heridos, entre ellos dos bomberos y un bebé de menos de un año. «No tenemos ninguna persona fallecida», subrayaron las autoridades locales, preocupadas por los fuertes vientos y la vegetación seca que podrían alimentar los incendios.
La situación en la capital, con casi tres millones de habitantes, era este miércoles de máxima alerta. Decenas de carreteras estaban cortadas, se recomendaba el teletrabajo para reducir los desplazamientos al mínimo, los centros educativos suspendieron las clases presenciales, en las calles se escuchaban constantes explosiones de depósitos de gas... El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, decidió cancelar toda su agenda en Nueva York –donde había viajado con motivo de la Asamblea General de la ONU– y regresar a su país «para comandar todos los esfuerzos ante el enemigo».
La ministra del Interior, Mónica Palencia, puso el foco sobre los posibles responsables de los incendios, que se iniciaron de forma simultánea en varias lomas de la periferia oriental de la ciudad y se sospecha que fueron provocados tras hallar varios bidones con material inflamable cerca de la zona donde se originaron. Con el objetivo de dar con los culpables, que serán procesados por terrorismo, se ha creado un sistema de recompensas para quienes den alguna pista sobre lo ocurrido. Palencia pidió ayuda asimismo para localizar a quince caballos de la Policía Nacional extraviados durante los fuegos.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.