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Carlota Pérez
Enviada especial. Marrakech
Martes, 12 de septiembre 2023, 22:10
Pintura nueva, alfombras extendidas, soldados con el uniforme de gala y una imagen: el rey Mohamed VI en Marrakech. Cuatro días después del peor terremoto que Marruecos ha vivido en su historia, el rey visita a los heridos por el seísmo en el hospital universitario ... que lleva su nombre. El Boing 747-8 Real matrícula CN-MBH despegó este martes a media tarde desde el aeropuerto de Rabat-Salé hacia Marrakech-Menara. Desde el aeródromo, escoltado por una larga comitiva de más de cuarenta coches y motos de la guardia real se dirigió al centro hospitalario Mohamed VI para saludar a las víctimas del temblor.
La puerta principal del hospital quedó reservada para la visita oficial y los pacientes y familiares tuvieron que utilizar la entrada de Urgencias, a escasos metros de la otra. Según la agencia oficial, MAP, el rey, quien donó sangre para las víctimas, visitó la unidad de cuidados intensivos y de hospitalización de los afectados por el seísmo, «donde el soberano fue informado del estado de salud de los heridos, así como de los cuidados que les prestaron los equipos médicos movilizados tras este gran desastre natural». Y el comunicado continuaba: «La visita de Su Majestad el Rey al Hospital Universitario Mohamed VI refleja la gran preocupación con la que el soberano rodea a las víctimas del terremoto de Al-Haouz».
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Las labores para preparar la zona fueron llevadas con extremo cuidado: ni una colilla en el suelo dejaron las decenas de trabajadores que limpiaron los alrededores del hospital antes de que llegara el monarca. La Guardia Real y otros cuerpos de las fuerzas armadas marroquíes, desplegadas en los alrededores del centro sanitario, acordonaron la zona y cientos fueron los curiosos que se acercaron a ver a Mohamed VI. Autobuses llenos de guardias de seguridad y agentes en cada esquina de la avenida Ibs Sina prepararon un dispositivo de seguridad espectacular. Sin embargo, los medios no fueron bien recibidos y, excepto los oficiales, que contaban con autorización, fueron obligados a abandonar la zona.
Los medios marroquíes aseguraron que después de su visita al centro sanitario viajará a una de las zonas más afectadas, como el campamento de Asni, levantado a 48 kilómetros de Marrakech y donde hay cerca de 200 supervivientes. Justo al lado, el ejército levantó el lunes un hospital militar de campaña para atender a los heridos y a las víctimas que necesiten asistencia médica. Al menos 600 personas, según uno de los soldados, estarán trabajando en este lugar.
Muchas han sido las críticas al monarca por su desaparición en estos días tan duros para la sociedad marroquí. «¿Dónde está el rey?», preguntaban los afectados por el seísmo ante la escasez de mensajes por parte del Gobierno y de la Casa Real marroquí. Tan sólo hubo un mensaje el lunes lamentando la tragedia.
«Han dicho que viene el rey, aquí estamos para saludarle», contaba Mohamed, vecino de Marrakech. El Hospital Universitario Mohamed VI se ha convertido en los últimos días en el centro de referencia donde han sido reubicadas las víctimas más graves del seísmo, al contar con mejores instalaciones que los hospitales de campaña levantados cerca de los pueblos más afectados.
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