Macedonia repele las entradas con gases lacrimógenos

La tensión que se vive en las fronteras de Grecia debido a las restricciones de entrada impuestas por varios países de la ruta de los Balcanes estalló ayer en el paso de Idomeni, donde un grupo de personas intentó entrar por la fuerza en Macedonia y la Policía de este país respondió con el lanzamiento de gases lacrimógenos. Hasta quince personas tuvieron que ser atendidas por problemas respiratorios por sanitarios de Médicos Sin Fronteras (MSF) destacados en el campo de refugiados de Idomeni. Según concretó la ONG en su cuenta de Twitter, nueve de los atendidos eran niños. Además, otras siete personas, tres de ellas menores de edad, sufrieron heridas debido a la rotura de una alambrada.

El enfrentamiento surgió después del cierre de la frontera decidido por las autoridades macedonias durante la mañana. El domingo no se había permitido la entrada desde Grecia a casi ningún emigrante y el lunes de madrugada se dejó pasar a 300 iraquíes y sirios antes de cerrar la valla de nuevo. Fue entonces cuando un grupo de personas decidió avanzar hacia la frontera para abrir el paso. Consiguieron desbordar el cordón de la Policía griega y llegaron a la vía férrea, donde una parte del grupo se tendió sobre los raíles mientras otros intentaban romper la alambrada y gritaban a la Policía macedonia que abriera las fronteras. Según AFP, algunos de los inmigrantes lanzaron piedras contra la barrera y la Policía macedonia respondió lanzando gases lacrimógenos contra el grupo. Por su parte, Efe hablaba también del lanzamiento de bombas aturdidoras.