Pastor se hace un lío con el pañuelo

A Pastor no se la notó cómoda desde el primer momento. Tanto que el pañuelo se le desprendió del pelo hasta en dos ocasiones sin que aparentemente ella se diera cuenta. En la primera ocasión la ministra fue alertada por el titular de Exteriores. En la segunda un Margallo sonriente le cubrió el mismo de nuevo el cabello ante la sorpresa de su compañera en el Consejo de Ministros, a lo que Pastor respondió: "Nada sería uno sin ayuda". Y es que lo último que quiere el jefe de la diplomacia española es un lío diplomático con el nuevo amigo iraní a cuenta de un pañuelo.