Alzando el vuelo ¡Arriba las plumas!

Las faldas y vestidos de plumas conquistan las calles y se trasladan de los trajes de fiesta a creaciones con acabados en cuero, napa o piel vuelta.

Los orígenes de esta tendencia los pudimos ver en la pasarela de la mano de Duyos, que apostó por su versión más nocturna, festiva y sofisticada jugando con la clásica combinación black & white. Marcos Luengo juega con la fantasía y la posibilidad de convertir una capa en algo de lo más especial incorporando plumas delicadas en la capucha. La gama cromática del diseñador se desliza en los tonos neutros y pastel como el aguamarina. Las plumas también las usa para otorgar movimiento y sensualidad a diseños más neutros y lineales.

Ion Fiz arriesga con creaciones atrevidas al más puro estilo de un baile de máscaras. Las plumas forman parte de sus diseños de forma sutil pero toman protagonismo en tocados y detalles que acaparan la atención de todas las miradas. Los colores estrella se centran en el negro, gris plata y el marino.

Por su parte, Malne se decanta por la sutileza de las plumas en accesorios como los tocados y apuesta por la versión clásica de los años 20 usando las de pavo real. Una combinación perfecta con unos diseños elegantes, femeninos y cargados de sensualidad.

Las plumas en el calzado también reinarán durante la temporada en sandalias de fiesta, zapatos e incluso en deportivas o mocasines. Una forma perfecta de incorporarlas en el día a día es mediante un look andrógino o en clave masculina añadiendo un calzado tipo Oxford con este detalle.