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Isaac Asenjo
Miércoles, 25 de enero 2017, 12:22
La muerte de Bimba Bosé ha conmocionado a todo el mundo en la redes sociales. Pero éstas, han vuelto a ser el centro de la polémica y el debate. Miles han sido los mensajes de despedida en los que los usuarios han querido dar el ... pésame a la familia de la polifacética modelo y transmitirles todo su apoyo. No obstante, como en otras ocasiones, hay quien ha hecho uso de Twitter para insultar, criticar y mostrar lo cruel que puede ser el ser humano en este tipo de casos, escribiendo mensajes deleznables sobre la artista, fallecida a causa de un cáncer de mama a los 41 años.
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Los mensajes de la polémica, además de la falta de sensibilidad mostrada por un periodista, tienen que ver con los ataques contra la orientación sexual de la modelo y de su tío, el cantante Miguel Bosé. Algunos tuiteros, los cuales se enorgullecen de militar en partidos de derecha y se consideran católicos y protectores de la familia, se han alegrado en público del fallecimiento de la modelo.
En las últimas horas han sido muchos los usuarios que se han preguntado si la Fiscalía actuará contra estos mensajes vejatorios de la misma manera que se ha actuado en otros casos polémicos, como la reciente condena a César Strawberry, cantante de Def con Dos, por enaltecimiento del terrorismo, la petición de más de dos años de cárcel para Cassandra, una tuitera de Murcia, por difundir chistes sobre Carrero Blanco, o el juicio por el que fue absuelto Guillermo Zapata tras burlarse del exterminio de los judíos y las víctimas del terrorismo.
Precisamente, la fiscal de Sala de criminalidad informática, Elvira Tejada, pedirá a las unidades policiales una investigación de los mensajes más ofensivos por su contenido homófobo e insultante para analizar con detenimiento su contenido. Una vez la fiscal estudie esos comentarios evaluará la posibilidad de emprender alguna actuación penal, que solo podría promover en el caso de los mensajes con alusiones a la homosexualidad, pues los autores de esos comentarios podrían haber cometido un delito de odio, tipificado en el artículo 510 del Código Penal.
No obstante se trata de un asunto complicado jurídicamente, ya que en el caso de comentarios injuriosos contra una persona, solo el perjudicado puede iniciar acciones penales: en este caso su tío Miguel Bosé.
Del mismo modo, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, se ha mostrado convencido de que hay que investigar los tuits ofensivos para identificar a sus autores y comprobar si han cometido algún delito. En declaraciones a los medios antes de participar en la jornada 'Justicia y fomento de la actividad económica' de Fomento del Trabajo, el ministro ha considerado razonable que la Fiscalía y en su caso el juzgado competente analice los comentarios y ha indicado que "nadie está al margen del cumplimiento de la ley ni puede utilizar instrumentos de comunicación y difusión de la información para la ofensa y la comisión de delitos".
Catalá ha recordado que en la última reforma del Código Penal se fortalecieron los tipos delictivos y las penas para los delitos cometidos utilizando las redes sociales y en particular para delitos de odio y discriminación.
El caso recuerda además otros ejemplos de que las redes sociales se han convertido en el mejor escondite de los cobardes, como ya ocurriera con el torero Víctor Barrio, fallecido en la plaza de toros de Teruel el pasado verano; y Adrián Hinojosa, el niño enfermo de cáncer cuya mayor ilusión era convertirse en matador de toros. La Fundación Toro de Lidia recopiló más de medio centenar de mensajes vejatorios publicados en distintas redes sociales y acudió a la Policía a denunciarlos.
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