Los duques de Cambridge presentan a su hija

El nombre de la pequeña, siguiendo la tradición de la familia real británica, no se dará a conocer hasta dentro de unos días. La niña llevará el título de princesa de Cambridge y pasa a ocupar el cuarto lugar en la línea de sucesión al trono después del príncipe Carlos, el príncipe Guillermo y el príncipe Jorge.

Se ha hecho esperar

La esposa de Guillermo de Inglaterra, que salió de cuentas a finales de abril, ingresó en la maternidad a las seis de la mañana. Poco después, el palacio de Kensington anunciaba que el nacimiento de la segunda hija de los duques de Cambridge se había producido a las 09.34 horas y en presencia del príncipe Guillermo y que tanto la pequeña, que ha pesado 3,713 kilos, como la madre se encontraban "bien".

Un pregonero real anunciaba la buena nueva. La noticia del nacimiento era recibida con vítores. El parto ha sido asistido por un equipo médico dirigido por el doctor Guy Thorpe-Beeston, el ginecólogo de la Casa Real.

El primer ministro, David Cameron, en plena campaña para las elecciones del próximo jueves, se ha congratulado por la noticia. "Felicidades al duque y la duquesa de Cambridge por el nacimiento de su hija. Estoy absolutamente contento por ellos", ha escrito en Twitter.

Quien más efusivamente ha celebrado la llegada de la princesa ha sido su abuelo ell príncipe Carlos, que ya había revelado su preferencia por una nieta. Acompañado por su esposa, la duquesa de Cornualles, ha reconocido abiertamente a la salida del hospital que estaban "absolutamente encantados".

Enorme expectación

Tras conocerse el ingreso de la duquesa de Cambridge, decenas de periodistas se apresuraron en acudir a Saint Mary y las cadenas de noticias retransmiten en directo desde el lugar. A diferencia de hace dos años, a los periodistas no se les permitió acampar fuera de la maternidad antes de que Catalina ingresase. Quienes sí pudieron hacerlo fueron un puñado de incondicionales que llevan viviendo varios días ante la maternidad y a los que la pareja real envió dulces para amenizar la espera. "¡Mi consejo a la familia real es que tengan a los niños en verano!", señaló uno de ellos, Terry Hutt, quejándose del frío, al empezar su decimotercer día ante el hospital.

Un centenar de salvas -62 desde la Torre de Londres y 41 desde Green Park- rendirá homenaje a la recién llegada, que ocupará la cuarta posición en el orden de sucesión al trono británico.

Bautizo

En los meses posteriores a su nacimiento, la hija del duque y la duquesa de Cambridge será bautizada en una capilla real según el rito de la Iglesia anglicana, vestido con una réplica del traje de encaje y satén que usó la hija mayor de la reina Victoria en 1841. En el bautizo se usará agua del río Jordán, que desemboca en el mar Muerto y en el que, según el Nuevo Testamento, Jesús fue bautizado por Juan Bautista.

Este nuevo miembro de la familia real podría ser particularmente lucrativo para la economía de Reino Unido, sobre todo al ser niña, por las ventas de cualquier ropa que lleve. La London School of Marketing estima que podría aportar ingresos de hasta 300 millones de libras.