Un hombre muere tras tener sexo con un espantapájaros

El sujeto tenía 58 años y trabajaba como peón en una hacienda rural desde hacía 8 años. Según cuenta el Diario Uno, era un hombre solitario que no recibía visitas ni se le veía con otras personas. Su jefe, preocupado porque llevaba varios días sin verle, fue a buscarlo su domicilio. Fue entonces cuando vio la escena y llamó a la Policía. «Durante una primera inspección ocular, parecía que había dos cuerpos sin vida. Luego se pudo comprobar que en realidad el segundo cuerpo era un muñeco con características especiales», narra el fiscal Rodolfo Moure.

El espantapájaros tenía un tubo de 15 centímetros que sobresalía de la bragueta, además de tener los labios pintados, como si emulara a una mujer. El fallecido estaba en un estado avanzado de descomposición, debido a que la muerte se produjo 24 o 48 horas antes. Se cree que no hay ninguna tercera persona implicada en la muerte, debido a que no hay signos de violencia. Aún así, las autoridades analizarán el muñeco para dilucidar esa posibilidad, no obstante, predomina la teoría de que la muerte fue natural o bien, fruto de algún tipo de juego sexual.