Cameron surfea en España

El viaje arrancó con un vuelo de Ryanair desde el aeropuerto de Stansted hasta el de Lanzarote. Como una familia más, lo primero que hicieron los Cameron fue buscar un supermercado y hacer la compra antes de establecerse en el lugar elegido para alojarse. Unos amigos les recomendó Casa Tomarén, una finca con siete viviendas ubicada en El Islote, en San Bartolomé, rodeados de frutales, huertos y viñedos, un reducto en medio del paisaje volcánico del parque natural de La Geria.

Pastora Martín, la propietaria del negocio, una sevillana que llegó hace 42 años a la isla, pensó al principio, hace dos meses, que la mujer que decía ser la secretaria personal de Mr. Cameron le estaba tomando el pelo, que no podía ser verdad que el primer ministro británico fuese a pasar la Semana Santa en sus viviendas de arquitectura lanzaroteña construidas en el siglo XVIII.

A Zapatero le gusta

Después de establecerse, la familia que ha dejado por unos días el número 10 de Downing Street se lanzó al turismo. Primero hicieron una parada en Teguise, la antigua capital de la isla -ahora es Arrecife-, para recorrer las viejas y pintorescas calles del lugar conocido como La Villa. Tras tomar un café en una mesa al aire libre, el primer ministro, su mujer y sus tres hijos se marcharon a la playa, a la espectacular Caleta de Famara para tomar el sol, darse un baño y, en el caso del dirigente, hacer un poco de deporte practicando el surf.

Este pequeño paraíso es también un lugar que adora el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y allí, en esa playa de seis kilómetros que se encuentra al cobijo de un risco, las peñas del Chache, Pedro Almodóvar rodó algunas de las escenas de 'Los abrazos rotos'. Esta orilla es frecuentada también por aficionados al surf, pues se encuentra muy expuesta a los vientos alisios y eso la convierte en un lugar ideal para este tipo de deportes. David Cameron alquiló una tabla y, vestido con un bañador y una camiseta de neopreno de manga corta, se lanzó a coger olas mientras Samantha, su esposa, se bañaba y tomaba el sol.

La actividad y la brisa marina devieron abrir el apetito de la familia. David Cameron estuvo surfeando hasta pasadas las dos de la tarde y sació el hambre comiendo en Casa García, un restaurante de productos del mar situado en la propia Caleta de Famara. Los responsables de turismo de Lanzarote están encantados con la visita de Cameron, que otros años había optado por otros destinos españoles como Ibiza y Granada, pues consideran que puede impulsar una mayor presencia de visitantes británicos en los próximos meses, aunque ya es un destino muy conocido como demuestra el dato de que en 2013 ya hubo cerca de un millón de turistas llegados de las islas.