Frustración, recesión, el voto indeciso y un poco de pintalabios en el encuentro entre los candidatos

Todos llegaron con puntualidad británica a la cita, excepto Luis Illoro (Unidas Podemos), que lo hizo con puntualidad riojana: diez minutos antes de la hora señalada. Será porque él vive en Logroño y aquí no hay atascos y no necesita coger el metro ni el tren de cercanías (bueno, en Logroño ni el de lejanías).

La ética es importante en política pero la estética también. En los preámbulos, Cuca, coqueta, sacó su pintalabios rosa para dar lustre a su atuendo de estilo juvenil-colegial. María Luisa Alonso y María Marrodán apostaron por el negro, que siempre queda bien. Luis Illoro fue fiel a su jersey de lana. Jorge Cutillas asistió más trajeado.

En torno a una mesa redonda comenzó el juego de las sillas. ¿Dónde se sentará cada uno? A la izquierda, las tres candidatas, que mostraron su buen rollo entre ellas (las tres fueron elegidas en las fallidas elecciones anteriores y han compartido viajes y zozobras en Madrid). La popular Gamarra y la ciudadana Alonso mostraron su disposición a unir fuerzas tras las próximas elecciones. Quién sabe si, como estrategia, la socialista María Marrodán se sentó entre ambas. Probablemente fue casualidad, pero mucha.

A la derecha, Illoro y Cutillas no mostraron tanto 'feeling', sobre todo cuando éste propuso recortes estructurales en la economía y «mano dura» en Cataluña. El candidato de Unidas Podemos dijo sentir «escalofríos» al oír esas palabras. Chispas que no provocaron ningún incendio. Cada uno ya sabe las cartas que juega en esta partida.

No obstante, todos estuvieron de acuerdo en que la repetición de elecciones ha sido frustrante, que hay que buscar soluciones a la recesión económica, que las encuestas tienen poco de ciencia y mucho de ficción y que hay que luchar por el voto indeciso. Y todos –menos, claro, María Marrodán– señalaron a Pedro Sánchez como el culpable de que haya que volver a pasar de nuevo por las urnas.

Eso sí, al final de la cita cada uno tuvo su propio mantra. Para Cuca Gamarra, el centro-derecha; para María Marrodán, el bloqueo del resto de partidos; para María Luisa Alonso, facilitar la siguiente investidura; para Luis Illoro, un gobierno de progreso; y para Jorge Cutillas, España (Cataluña incluida).