Las fechas para la elección del presidente: ¿qué viene ahora?

Después de haber resuelto todos los recursos, se proclaman los resultados. Después se van expidiendo las credenciales a los diputados y senadores, que ya se pueden acreditar. Se espera que lo hagan en torno al 8 o 10 de agosto.

La primera fecha clave del calendario es el 17 de agosto. Ese día se constituyen las Cortes (cada una en su sede) y se elige al presidente del Congreso.

Y comenzará la batalla, ya que para resultar elegido el candidato necesitará de una mayoría absoluta (es decir, 176 diputados que voten a favor) en la primera votación o de simple (más síes que noes) en la segunda. Una vez elegido, este se traslada a la Zarzuela para informar al rey.

El Jefe del Estado, Felipe VI, comenzará una serie de consultas con los representantes de los partidos con representación en el Parlamento que se espera que comience alrededor del 21 de agosto. Después, el rey designará a un candidato a la Presidencia del Gobierno. En este caso, a pesar del resultado ajustado de los bloques, el ganador de las elecciones ha sido Alberto Núñez Feijóo, así que debería ser él. Para llegar a presidente se repite la fórmula de una primera votación para la que se exige mayoría absoluta, y una segunda (48 horas después) con mayoría simple.

Puede haber sorpresas, como cuando Mariano Rajoy, tras las generales de diciembre de 2015 renunció a formar Gobierno, pero el candidato del PP ha dejado claro que su intención es intentar formar Gobierno.

Ese día termina el plazo para constituir los grupos parlamentarios. Después, la Mesa del Congreso deberá ratificarlos para constituir la Junta de Portavoces, que es el órgano que ordena las sesiones plenarias. También se distribuyen los escaños del hemiciclo. Recordemos que para tener grupo propio hay que contar con al menos 15 escaños o sumar cinco diputados y obtener el 5% de los votos en todo el país, o bien el 15% en todas las circunscripciones en las que se concurre.

Constituidos los grupos parlamentarios y la Junta de Portavoces, y repartidos los asientos del hemiciclo, ya se podrán convocar sesiones plenarias. Se calcula que como muy pronto el Debate de Investidura podría celebrarse a finales de agosto o la primera semana de septiembre.

Escenario 1: Si se ha logrado la investidura al primer intento, el nuevo presidente podría tomar posesión el 8 de septiembre y ya nombrar de inmediato a sus ministros.

Escenario 2: si no se ha logrado la investidura en ese debate, tras la primera votación fallida comienza a contar un plazo de dos meses para posibles nuevos intentos. Eso implica que, si hay un fracaso a la primera y si no se logra una alternativa viable en los dos meses posteriores, habría que disolver las Cortes nuevamente en noviembre y celebrar elecciones a los 47 días, o sea en fechas navideñas o principios de enero.