¿Quién se queda con el voto de Ciudadanos?

Pero en 2019 fueron casi 19.000 los riojanos que confiaron en un proyecto que iba a regenerar la vida política y que se ha quedado sin apenas fuerzas y apoyos. Los principales partidos lo saben y pelean por convencer a ese electorado que, harto de ellos, dio el salto hacia otras propuestas y que ahora desandará el camino para volver al bipartidismo o buscar cobijo en otras alternativas.

En La Rioja, según la encuesta de GAD3 para Vocento, el gran beneficiado de este trasvase de votos será el Partido Popular. Casi seis de cada diez votantes que apostaron por el proyecto que en 2019 encabezaba Pablo Baena pretenden votar ahora a Gonzalo Capellán. En cifras redondas se trata de 10.800 votos que seguirían la senda emprendida por muchos altos cargos de Ciudadanos, como Belinda León en La Rioja o Luis Garicano, ex europarlamentario por Ciudadanos, que este mismo lunes ha fichado por la fundación Reformismo 21 vinculada al PP.

Esos 10.800 votos, en los comicios de 2019 equilibrarían la balanza entre PSOE y PP en 2019. Los de Capellán (entonces encabezados por José Ignacio Ceniceros) tuvieron la confianza de 53.770 riojanos, mientras que Andreu obtuvo el respaldo de 62.925. Si a los populares se les suman esos 10.868 y a los socialistas, los 2.200 que supondrían el 12% de votantes de Ciudadanos que se suman al carro de Andreu, ambas formaciones estarían en un empate técnico: 65.125 votantes los socialistas, 64.638 los de Capellán.

Ciudadanos solo podría conservar el 1% de sus votantes, cuyo filón también sería aprovechado por Vox (7% de votos trasnferidos) o PR+-España Vaciada (4%), siempre según los datos de la encuesta de GAD3.

Por cierto, los votantes del PP son los más fieles a sus siglas en las autonómicas: tres de cada cuatro volverían a repetir voto a pesar de todas las polémicas que, en el último año y medio, han sacudido a los de Duquesa de la Victoria. Mientras, el 68% de los votantes de Andreu están satisfechos con su trabajo y volverían a confiar en ella. Como curiosidad, los más díscolos entre los grandes son los de Podemos-IU, cuya fidelidad supera escasemente el 50%, y el Partido Riojano-España Vaciada, que retendría poco más de un tercio de los votos, lo que pondría difícil su entrada al Parlamento regional.

Aunque varían los porcentajes tres las autonómicas y las municipales de Logroño, la esencia de la transferencia de votos se mantiene. El 47% de los votantes que eligieron Ciudadanos en 2019 se decantarán por el PP en 2023, mientras que solo el 6% se habría visto seducido por los proyectos de Pablo Hermoso de Mendoza.

Numéricamente, los más de 10.000 votos de Ciudadanos se diluirían con un trasvase de casi 4.800 sufragios para el proyecto de Conrado Escobar y apenas 600 para Hermoso de Mendoza. En este caso, la mutación del naranja al azul, según la encuesta de GAD3, también colocaría a los dos grandes partidos en un empate (sin contar con otros factores, por supuesto). Eso sí, en Logroño hay muchas dudas: el 18% de los votantes de Ciudadanos en las últimas municipales de Logroño aún no saben a quién votar.

Y, respecto a la fidelidad, los populares son los más fieles también en la capital: un 77% repetiría el 'contrato' con Conrado Escobar, mientras que el 64% de los socialistas mantendría su apoyo a Hermoso de Mendoza. Al menos, de boquilla, porque ya se sabe que la única encuesta fiable es la que se publica un día después de las elecciones.