LOGROÑO, UNA FOTO PARECIDA AL 28A

Como ya aventuraba el mismo sondeo para las elecciones regionales que este periódico publicó ayer, el pronóstico general apunta a un triunfo del PSOE que no le garantiza la mayoría absoluta. El Ayuntamiento albergaría de un salón de plenos tan atomizado como el que se dispone a acoger la Cámara autonómica. Hasta seis grupos podrían tener representación, un escenario que obligará a alcanzar acuerdos de gobernabilidad donde habría que atender las reivindicaciones del resto de fuerzas, un poco al estilo de lo ocurrido en el último mandato de la popular Cuca Gamarra al frente del Consistorio. Será clave el concurso de la tercera candidatura más votada, según la estimación del sondeo: Ciudadanos, que vería no obstante rebajada su actual representación. La formación naranja se arriesga a perder uno de sus actuales cuatro concejales.

De modo que el futuro ganador deberá tener en muy en cuenta a las fuerzas menos representadas. Cambia Logroño se quedaría fuera del Ayuntamiento, pero la otra marca que compite por el mismo nicho ideológico (Unidas Podemos) obtendría tres asientos en el plenario, tal vez decisivos para la formación de mayorías. A ese rol de jugar un papel decisivo se apuntan otras dos candidaturas. El Partido Riojano, que no tiene seguro revalidar el próximo domingo el acta que ostenta ahora, e incluso Vox, que irrumpiría en el principal Consistorio de la región si logra franquear la barrera del 5% donde le sitúa la encuesta.

Durante toda la campaña, los perdedores del 28A (señaladamente, el PP) han procurado distanciar las prospecciones demoscópicas del 26M de aquel resultado, fatal para sus intereses. Confiaban en que el carácter más cercano de la política local favoreciese a sus candidatos, así como su arraigada implantación. En realidad, el sondeo depara una fotografía de la votación en las municipales logroñeses casi análoga al retrato que se tomó en las generales. La tendencia más llamativa apunta hacia un retroceso en los apoyos de los pequeños (UP perdería en un mes casi cinco puntos, Ciudadanos cerca de ocho y Vox, tres), en beneficio de los grandes. El PP subiría cinco puntos, pero es el mismo porcentaje de mejora que experimenta el PSOE, de modo que en su pulso particular no habría novedades. Para lo cual, debe advertirse, tendría que conspirar a favor de la candidatura socialista un factor que resultó decisivo hace un mes: la alta participación. En esas condiciones, el PSOE ganaría las elecciones. Un pronóstico, que por cierto, hacen suyo más de la mitad de los encuestados. Sólo tres de cada 10 entrevistados opinan que ganará el PP.