De lo local a lo general

Cuca Gamarra es la que se presenta en Madrid con el currículo más completo. Llega desde la Alcaldía de Logroño para cumplir uno de sus anhelos políticos: representar a los riojanos desde la cima del Legislativo: «He adquirido este compromiso de defenderles y de defender los intereses de La Rioja, lo que me provoca un punto de emoción pero también de responsabilidad». Abochornada por la utilización propagandística que los independentistas han hecho de la constitución de la Cámara, Gamarra inicia esta nueva etapa con la tranquilidad «que dan años de experiencia desde otros responsabilidades pero con el mismo compromiso: defender los intereses de los riojanos». Su pronóstico para la legislatura que ahora comienza es de complejidad, algo que a su juicio ya se vio ayer y que «permite intuir lo que va a ocurrir»: un apoyo de Podemos y de los independentistas al Gobierno de Sánchez. Por su parte, defiende el compromiso de su partido para ser una oposición firme, seria y constructiva.

María Luisa Alonso es la primera diputada riojana por Ciudadanos. Si la parte magra del reparto de escaños marcado por la Ley D'Hondt se la llevan habitualmente en La Rioja el PP y el PSOE, en esta ocasión el cuarto diputado en disputa ha basculado de Podemos a Ciudadanos. Sara Carreño deja el hemiciclo y María Luisa Alonso, después de cuatro años en el consistorio logroñés, entra con todos los honores de diputada. Su primer día en Madrid ha sido para ella «una experiencia impresionante, cargada de mucha simbología. Me he acordado de La Rioja, de la gente de La Rioja y de mi equipo». Su ilusión es comparable a la que sintió cuando recogió su acta de concejal en junio de 2015: «Llego con las mismas ganas que entonces y con mucha ilusión de que comience la legislatura para proponer ideas para La Rioja y para todos los españoles». Nervios, los justos: «He ido muchas veces como público, así que al principio estaba muy tranquila. Sólo he sido consciente de la trascendencia del momento y me emocioné cuando oí mi nombre para salir a votar (para conformar la mesa del Congreso). En cuanto a lo que espera, «será una legislatura apasionante, llena de muchos retos porque no va a ser fácil, va a ser complicada. Intentaremos conseguir lo mejor para nuestra tierra y evitar que el Gobierno de Sánchez meta mano al bolsillo de los españoles y de los riojanos».

También desde una concejalía llega a la capital María Marrodán. Forjada en la política municipal y autonómica, Marrodán reconoce que el paso a la política nacional «es muy grande porque sientes el peso de la institución». ¿Vértigo? «Hay vértigo; si no lo hubiera sería una irresponsabilidad. Es algo muy grande porque sientes el peso de la institución, lo que simboliza». Marrodán ocupa en cierto sentido el hueco que deja César Luena y ella así lo ve. «Evidentemente siento esa responsabilidad pero también es un orgullo. Él realizó un trabajo parlamentario estupendo. Es un reto y una suerte de contar con su apoyo. Trataré de estar a la altura». A su juicio, la primera sesión ya ha sido reveladora porque «cada fuerza política ya ha mostrado sus armas y ha quedado claro que el Grupo del Partido Socialista es el que está ahí para trabajar en un proyecto de futuro».

Juan Cuatrecasas se estrena en política y lo hace tras trabajar sin denuedo por la dignidad de los más pequeños desde la asociación Infancia Robada. Su estreno en política lo ha vivido «con emoción, pero con tranquilidad». «Es algo muy bonito –añade– ser representante de los riojanos en Madrid». Uno de sus objetivos es llegar a aprobar una Ley contra la Violencia Infantil que aumente los años de prescripción de los delitos, o incluso que no prescriban, y que establezca medidas de acompañamiento a las víctimas. Aunque esta es una de sus prioridades, Cuatrecasas quiere dejar claro que «estoy en el Congreso por este tema pero también por La Rioja, porque hay muchas cosas que se pueden mejorar. Llevo toda la vida en La Rioja y quiero trabajar por ella».