Una coleta indefensa

"Mi coleta ha volado", dice José Manuel Zúñiga, que ha logrado plaza como concejal número tres de la lista de 'Cambia Logroño'. Anoche fue un día de celebraciones y Zúñiga ya no podía seguir viendo el recuento en los colegios porque le iba a dar algo así que decidió salir zumbando para la sede y contagiarse del colapso de sus compañeros cada vez que iban sumando concejales. "Lo gracioso de la historia de la coleta es que yo no me acordaba, pero vuestra fotógrafa Sonia Tercero me recordó lo que había dicho en alguna ocasión con respecto a si sacábamos el cuarto concejal. Ella se acordó y yo pensé, si no es ahora... y claro, allí mismo salieron unas tijeras de esas de colegio y mi coleta se convirtió en historia. La mía no es una coleta tan defendida como la de otros", bromeaba este nuevo concejal.

"He dormido de maravilla, pero ayer estaba supervisando los votos en el Cosme García y cuando ví el montón de papeletas con nuestro logotipo empecé a enloquecer. Luego crucé al Polideportivo Las Gaunas y claro, allí hay otro tipo de votante, más Ciudadanos, 'Pepés y Pesoes', pero decidí salir corriendo para la sede. En el camino pensaba sobre qué urnas y en qué sitios se habían hecho los recuentos y fantaseaba sobre cuáles eran las que faltaban por contar. Es que no sabes...", declara este nuevo político que entra en listas procedente de la movilización social.

Siempre ha llevado el pelo largo y siempre lo ha lucido atado con una coleta. "Ya crecerá", explica, pero no como un lamento, sino como un acto deliberadamente divertido "porque el pelo volverá a crecer". No se lo piensa cortar por el hecho de formar parte de la bancada del Ayuntamiento y por aquello del decoro o el estilo personal. "Eso del decoro o la imagen me da igual. Yo voy limpito y punto, me preocupa más lo de la limpieza interior", asegura.

Asegura que sintió tanta alegría como pena por ver cómo se quedaba algún compañero fuera de la lista por poco. "Es que son tan válidos como yo o más y me da pena por todo el trabajo que han hecho...", asegura este nuevo concejal que si algo tiene claro es que, desde la atalaya que ahora se le pone delante, quiere defender la voz del pueblo y otorgarle derecho a réplica en los plenos, "darle dinamismo a la vida y la voz de la ciudad, que fluya el diálogo, que el Ayuntamiento no sea un circo o la puesta en escena de un paripé pactado de antemano", asegura este nuevo concejal, acostumbrado a dar la cara por los demás desde el movimiento vecinal.