Los vigilantes de El Prat volverán a la huelga el 8 de septiembre

La medida ha sido tomada por 115 de los 350 trabajadores que tiene la empresa en el aeropuerto barcelonés de forma unánime. Lo hacen precisamente cuando apenas faltan tres días para que el mediador designado por el Gobierno para resolver el conflicto, Marcos Peña, publique su laudo, que será de obligado cumplimiento para ambas partes, y sobre el que se desconoce su contenido, así como la postura de la empresa y la plantilla con respecto al mismo.

En cualquier caso, la huelga ha sido convocada para protestar por las "represalias" aplicadas por la empresa contra cuatro trabajadores por haber incumplido los servicios mínimos. De hecho, el asesor del comité de huelga, Juan Carlos Giménez, ha avisado de que se podrían ampliar si no se retiran las sanciones. En caso de que se retiraran, se anularía la convocatoria de huelga, que se presentará mañana ante el Departamento de Trabajo de la Generalitat.

Tras la reunión que Marcos Peña mantuvo el pasado miércoles con el comité de empresa, el que es presidente del Consejo Económico y Social (CES) indicó que evitará "limitar el daño" a las partes y mejorar la prestación del servicio y la calidad del trabajo. "Sabiendo que nadie va a quedar contento, lo que hay que hacer es limitar el daño y mejorar la prestación del servicio, la calidad del trabajo y la salud de los trabajadores, así como la capacitación de los mismos", apuntó el árbitro en declaraciones a los medios tras reunirse con representantes del comité de huelga.

Independientemente del resultado del laudo, los vigilantes de seguridad ya han anticipado que votarán en asamblea la resolución y, en caso de que estén de acuerdo en asumir las condiciones del mismo, se habrá acabado el conflicto laboral. Fuentes de Eulen han señalado que asumirán el dictamen de Peña como ya hicieron antes con la propuesta de la mediación de la Generalitat, que incluía un complemento de hasta 200 euros mensuales por trabajador en doce pagas.

Esa propuesta, rechazada en dos ocasiones por la plantilla de Eulen, suponía un incremento salarial máximo de 200 euros en 12 pagas --aceptado por la compañía-- e incluía un aumento de 25 vigilantes en cada puesto de control, que sumaban 76 personas más, frente a los 100 efectivos exigidos por el comité de huelga y los 21 de la propuesta inicial de Eulen. El salario base de un trabajador de seguridad de aeropuerto asciende a 1.100 euros brutos (907 euros más pluses).