España alcanza un récord de 155.800 vacantes de empleo sin cubrir

A pesar del récord registrado en el tercer trimestre, España sigue siendo uno de los países de la Unión Europea que menor tasa de vacantes tiene y el más bajo de la eurozona. La tasa de empleos sin cubrir en la eurozona se situó en el tercer trimestre en el 2,9%, una décima por debajo del dato correspondiente a los tres meses anteriores y el nivel más bajo desde el último trimestre de 2021, según Eurostat. Si lo ampliamos a todos los países de la Unión Europea, la tasa de vacantes era del 2,6% en el tercer trimestre. España tiene una tasa de vacantes del 0,9%, igual que Polonia y una décima más alta que en Bulgaria y Rumanía (0,8%). Entre los Estados miembros para los que se dispone de datos comparables, las tasas de puestos vacantes más altas en el tercer trimestre de 2023 se registraron en Bélgica (4,7%), Países Bajos (4,5%), Austria (4,2%) y Alemania. (4,1%).

En España, la tasa de vacantes en la industria y la construcción era del 0,5%, la más baja de la UE, mientras que la proporción de empleos disponibles en el sector servicios era del 0,8%, sólo por detrás del 0,7% de Bulgaria y en línea con Rumanía y Eslovaquia.

La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, mantiene una atencióne especial sobre las ofertas de trabajo y las vacantes por ser uno de los indicadores de la futura evolución de los salarios, clave para prever el comportamiento de la inflación, que es lo que finalmente determinará si el BCE empieza a suavizar la senda de los tipos de interés o no.

En España los salarios subieron un 4,2% entre julio y septiembre respecto al mismo trimestre de 2022 para situarse en un promedio de 2.118 euros brutos por trabajador y mes, la cifra más elevada en un tercer trimestre desde que comenzó la serie estadística en el año 2000. El coste salarial ordinario (que no incluye pagos extraordinarios y atrasados) repuntó un 4,5%, hasta los 1.931 euros mensuales, según los datos publicados por el INE.

El coste laboral medio por trabajador y mes (que incluye las remuneraciones y las cotizaciones sociales) subió un 5% en el tercer trimestre del año respecto al mismo periodo de 2022, hasta los 2.893 euros, su cifra más alta en un tercer trimestre desde el año 2000. No obstante, el incremento del coste laboral, que lleva ya once trimestres consecutivos de alzas, se ha moderado puesto que es ocho décimas inferior al registrado en el segundo trimestre (5,8%).

El sector servicios protagonizó el mayor repunte interanual del coste laboral en el tercer trimestre del año, un 5,2%, hasta los 2.825 euros por trabajador y mes, a la vez que lideró el avance de los salarios, con un alza del 4,5%, hasta los 2.081 euros mensuales.

Los mayores crecimientos salariales del tercer trimestre en tasa interanual se dieron en las actividades inmobiliarias (10,1%), información y comunicaciones (8,8%) y actividades artísticas y de entretenimiento (7,9%), mientras que las industrias extractivas fueron las únicas que recortaron salarios, con un descenso del 4,3%.

Aunque el coste salarial de la hostelería repuntó un 4,1% interanual en el tercer trimestre, hasta los 1.369 euros al mes, sigue siendo la cuantía más baja de todas las actividades. En el lado contrario, con los salarios más elevados, se encuentran el suministro de energía eléctrica (4.217 euros por trabajador y mes); las actividades financieras y de seguros (3.761 euros); información y comunicaciones (3.328 euros); industrias extractivas (3.009 euros), y actividades profesionales, científicas y técnicas (2.700 euros por trabajador y mes).

Por comunidades autónomas, los costes laborales más altos los tienen País Vasco (3.411 euros por trabajador y mes), Madrid (3.406 euros), Navarra (3.142 euros) y Cataluña (3.084 euros). Los más bajos se dieron en Extremadura y Canarias, con 2.279 y 2.433 euros, respectivamente.

El coste laboral aumentó en todas las regiones. Madrid, con un avance del 7,2% interanual, registró el incremento más acusado, seguida de La Rioja y Baleares, con subidas del 6,5%. Donde menos subieron fue en la Comunidad Valenciana (2,1%) y Extremadura (2,3%).

Según el INE, el coste laboral por hora efectiva subió un 5,5% en tasa anual en el tercer trimestre del año, hasta los 23,80 euros, debido al descenso en un 0,5% de las horas efectivas de trabajo.

La jornada semanal media pactada, considerando tiempo completo y tiempo parcial, fue de 35,3 horas. De ellas se perdieron, de media, 6,2 horas a la semana, de las cuales 6,2 horas no se trabajaron por vacaciones y el resto (1,3 horas) se deben a bajas por incapacidad temporal, permisos de maternidad y paternidad, otros permisos, y razones técnicas, económicas, organizativas, de producción y/o fuerza mayor. Si se añaden las horas extras y se restan las perdidas, las horas efectivas de trabajo a la semana se quedan en 27,9.