Los convenios autónomicos y provinciales tendrán prioridad sobre los estatales

Pero el Ejecutivo de coalición necesitaba los votos del PNV y pactó por la puerta de atrás una vieja reivindicación de los nacionalistas vascos. Y se tramitó de forma exprés, pero la prevalencia de los convenios regionales fue una víctima colateral de aquel golpe de Podemos a Yolanda Díaz por la reforma del subsidio y decayó el pasado enero.

La norma, que entrará en vigor de forma inmediata tras un nuevo acuerdo con el PNV, incluye mejoras respecto a lo pactado anteriormente. Así, el blindaje no será solo para los convenios autonómicos sino que se extenderá a los provinciales. En ambos casos prevalecerán cuando así se recoja en acuerdos interprofesionales y siempre que resulten más beneficiosos para los trabajadores que los estatales.

Lo que no podrán negociar es ninguna de las siguientes materias: periodo de prueba, modalidades de contratación, clasificación profesional, jornada máxima anual de trabajo, régimen disciplinario, normas mínimas en prevención de riesgos laborales y movilidad geográfica.

Cabe recordar que la prevalencia de los convenios vascos se trata de una medida muy polémica rechazada de plano por la CEOE, al considerar que «rompe la unidad de mercado». Es más, el hecho de que no se incluyera en la reforma laboral de 2022 fue el motivo del que el PNV rechazase esta normativa.

El portavoz del PNV en el Congreso Aitor Esteban, «celebró» el acuerdo y afirmó que «esta reivindicación histórica permitirá mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras y los trabajadores vascos, y también de las personas trabajadoras del resto del Estado».