La tarifa regulada de gas bajará un 30% el 1 de abril

La cotización del gas natural se ha reducido casi un 50%, desde los 5,23 céntimos/kWh en enero hasta los actuales 2,68 céntimos/kWh. Por otra parte, las cuentas públicas de 2023 han asumido la deuda generada desde que se aplican las medidas extraordinarias, ya que hasta el pasado mes de enero se han abonado 354 millones de euros a las comercializadoras de último recurso que ofrecen la TUR. En este sentido, la revisión del próximo sábado supone un descenso del 26,44% en la factural anual con impuestos para un cliente con TUR 1, del 30,14% para un cliente con TUR 2, y del 31,72% para un cliente con TUR 3.

La TUR es la tarifa regulada de gas a la que se pueden acoger clientes cuyo consumo sea inferior a 50.000 kWh al año. En la actualidad, se encuentran bajo esta modalidad unos 2,5 millones de usuarios.

Estos nuevos valores han sido el resultado de la «fuerte disminución» en la fórmula de cálculo de la TUR y de la «asunción» por parte de los Presupuestos del Estado de la deuda acumulada por el establecimiento de medidas extraordinarias para limitar el impacto de la guerra en Ucrania, según ha subrayado el departamento dirigido por Teresa Ribera.

Desde octubre de 2021, momento el que se establecieron las medidas para limitar el impacto de la guerra en Ucrania, los hogares acogidos a la TUR se han ahorrado de media entre 100 y 300 euros, dependiendo de su consumo, mientras que las pequeñas y medianas empresas han economizado 700 euros.

En el caso de la TUR para comunidades de propietarios, con una metodología de cálculo diferente a la de las TUR individuales, el coste de la materia prima repercutido en la fórmula de cálculo se ha reducido un 59,4%, desde los 6,6 céntimos/kWh de enero hasta los 2,68 céntimos/kWh de este mes abril, proporcionando una reducción para los siete tramos de esta TUR que oscila entre un 48,74% y un 57,28%, según el nivel de consumo.

La TUR es una tarifa regulada disponible para cualquier consumidor conectado a las redes de gas natural con un consumo inferior a 50.000 kilovatios hora (kWh) anuales, a la que se acogen unos 2,5 millones de hogares y pymes. El pasado mes de octubre el Gobierno decidió aplicar una importante limitación a la subida de esta tarifa regulada del gas para evitar un impacto en las facturas de los hogares que habría supuesto una subida superior al 30% en muchos casos por el alza del gas.

Ese tope normativo provocó un avalancha de peticiones de consumidores para trasladarse desde sus tarifas libres que tenían contratadas a la TUR regulada a través de alguna de las energéticas de referencia. El salto fue de tal calibre que se registraron numerosos retrasos en las compañías para habilitar este cambio.