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El IPC se situó en enero en el 0,6%, de acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En el caso de confirmarse, ello implicaría el incremento de 1,1 puntos en su tasa anual, ya que ... el pasado diciembre se colocaba en el -0,5%.
En este incremento de los precios, destaca la subida de la electricidad, que fue mayor este mes que en el ejercicio 2020. De hecho, hubo varios días en que en el mercado mayorista se marcaron niveles máximos históricos, como consecuencia del fuerte incremento de la demanda, coincidente con el temporal Filomena, la menor aportación de las energías renovables, y el encarecimiento del gas, la fuente de energía más cara, que, en cambio, había bajado en enero de 2020.
Pero el INE también recoge el impacto provocado por la subida de los alimentos y las bebidas no alcohólicas, que también se incrementaron este enero más de lo que lo hicieron en el primer mes del año pasado.
Otra razón del repunte del IPC reside en que en enero de 2020 los paquetes turísticos bajaron más que en el de este año.
Raymond Torres, director de coyuntura y análisis económico de Funcas, comenta que la subida de los precios en enero es un fenómeno puntual, por la ola de frío y los problemas de abastecimiento registrados también de manera muy localizada. «No habrá un impacto mucho más allá», asegura el economista, «no ha comenzado un proceso inflacionista». «Teniendo en cuenta el contexto de crisis, los salarios continúan contenidos y las empresas tienen que tener cuidado con sus precios para no perder mercado», concluye Torres.
La inflación subyacente, que desgaja del IPC sus elementos más volátiles, los alimentos no elaborados y los productos energéticos, subió cinco décimas en enero, hasta el 0,6%, desde el 0,1% registrado en diciembre.
Con este comportamiento, la inflación general deja atrás nueve meses seguidos en negativo, desde que en marzo marcó el 0% y en abril cayera abruptamente hasta el -0,7%. En este periodo que dejamos atrás, la inflación ha oscilado entre el -0,9% de mayo, cuando marco mínimos, y el -0,3% que marcó en junio.
Mientras tanto, la inflación subyacente, la que excluye del cálculo los alimentos y la energía, ha estdo en positivo durante toda la crisis del coronavirus. Marcó en diciembre su nivel más bajó, en el 0,1%, pero ha rebotado en enero hasta el 0,6%.
En comparación mensual, los precios han subido un 0,1% en enero respecto al mes de diciembre, frente a la subida del 0,2% registrada tanto en diciembre como en noviembre, y frente al 0,5% que se incrementó en octubre. En julio los precios se desplomaron un 0,9 en comparación mensual, mientras que en enero bajaron un 1%.
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