El euríbor se dispara a máximos de 2008 y encarece en 200 euros las hipotecas

«Si se observan las cifras históricas, la velocidad a la que se mueve el euríbor suele rondar entre 0,2 y 0,5 puntos y en el último año ya se ha movido sobre los tres puntos porcentuales», indica Laura Martínez, portavoz del comparador financiero iAhorro. En concreto, hace justo un año, el euríbor a 12 meses se movía en el -0,477%.

La brecha abierta en los últimos doce meses resulta clave para los préstamos a tipo variable que se actualicen tomando el mes de octubre como referencia. Por ejemplo, una persona que tenga contratada una hipoteca variable a 30 años de 150.000 euros y con un diferencial del 0,99% más euríbor, sufrirá un aumento de su cuota hipotecaria de alrededor de 230 euros, es decir, pasaría de pagar 450 euros al mes a abonar 680 euros a partir de la revisión, lo que equivale a un incremento de 2.800 euros anuales.

No obstante, hay que tener en cuenta que este cálculo es una media, pues no todos los préstamos se verán afectados por igual, al influir en las cuotas factores como el volumen del capital prestado, el momento en el que se contrató la hipoteca o las comisiones aplicadas por el banco.

Hay que tener en cuenta de que aunque un 75% del saldo vivo en hipotecas es todavía a tipo variable, según datos del Banco de España, la mayoría de los préstamos firmados en los últimos años han sido a tipo fijo, por lo que no se verán afectadas por el rebote del indicador. Además, es durante los primeros años de vida del préstamo cuando la mayoría de la cuota se destina al pago de intereses y menos al principal, con lo que las familias más afectadas por el repunte del euríbor serían las que han contratado sus préstamos de forma reciente, en los últimos cinco años.

Estos dos factores han provocado que los bancos minimicen en los últimos días la posibilidad de que se produzca una ola de impagos en su cartera hipotecaria. Pero reconocen que en los próximos meses habrá determinados clientes que sí se verán golpeados por esa subida de las cuotas en un momento de merma de su poder adquisitivo por el alza generalizada de los precios sin un ajuste similar de los salarios.

Según las últimas estadísticas del INE correspondientes a agosto, el tipo de interés medio aplicado en las hipotecas era del 2,52%. El tipo de interés medio al inicio es del 2,09% para las hipotecas sobre viviendas a tipo variable, al que habría que sumar el diferencial aplicado por la banca, y del 2,71% para las de tipo fijo. Así, encontrar una hipoteca fija por debajo del 2% resulta actualmente casi imposible, frente a las referencias por debajo de ese nibvel que abundaban hace solo un par de meses en los escaparates bancarios.

Ante esta situación, Gobierno y banca llevan semanas negociando para pactar nuevas medidas de protección a las familias afectadas, más allá del actual código de buenas prácticas. Pero el acuerdo final se ha retrasado ante las discrepancias en torno a si centrar las ayudas en la extensión de los plazos para pagar la hipoteca, como propone la banca, o directamente aplicar topes a las subidas de los precios.

Las previsiones que manejan los expertos apuntan a que el euríbor seguirá subiendo hasta cerrar el año cerca del 3%, pico que podría alcanzar ya en 2023 pese a que la cotización diaria del indicador empieza a reflejar ciertos síntomas de agotamiento con caídas en los últimos días de octubre. Un repliegue que llegó tras la última reunión del Banco Central Europeo (BCE), en la que el organismo decidió otro alza de 75 puntos básicos en los tipos de interés, pero moderó su discurso al asegurar que las próximas subidas se realizarían según las perspectivas de la inflación y de la propia economía.