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Mientras que la negociación de la reducción de jornada se ha pospuesto hasta después del verano ante la falta de avances claros, el Gobierno sí está acercando posturas con los agentes sociales en otra negociación paralela y también muy importante para los intereses de los ... trabajadores: la de la reforma de la jubilación parcial y activa y la de jubilación anticipada sin recortes para determinadas profesiones penosas o peligrosas, entre otras medidas que quedaron pendientes para culminar la última reforma de las pensiones.
Tanto el Ministerio de de Seguridad Social como los sindicatos y la patronal han valorado los «avances» que se han hecho en la reunión de este lunes, en la que se han ido limando asperezas en ciertos temas durante cinco horas de negociación. Desde el Ejecutivo han apuntado que se han «acercado considerablemente posiciones», se van a revisar algunas redacciones de los textos y mantener contacto en las próximas horas en aras de llegar a un acuerdo.
Y así lo reconoció también Cristina Estévez, secretaria de Política Institucional y Políticas Territoriales de UGT. «Ha habido un acercamiento importante en cuestiones que para nosotros eran importantes, que hacen suponer que quizás para las próximas 24 o 48 horas, si esas cuestiones quedaran resueltas, podríamos empezar a hablar de un principio de acuerdo», avanzó.
Para esto el Gobierno ha tenido que seguir haciendo cesiones y ha retirado de la mesa del diálogo social la propuesta de elevar a 38,5 los años de cotización necesarios para acceder a la jubilación parcial, algo que los sindicatos no estaban dispuestos a aceptar. Así, se han rebajado a 34 los años de cotización para la jubilación parcial con contrato relevo, aunque los sindicatos exigen que se disminuya hasta los 33 que se exigen ahora.
Y lo mismo sucede con la jubilación parcial con contrato relevo para los sectores que no sean manufactureros: el ministerio propone adelantar a tres años la edad de jubilación en lugar de los dos actuales, pero a cambio piden 36,5 años de cotización, tres más que ahora pero menos que los 38,5 que pedían al inicio de la negociación.
Algo más escépticos con los avances se mostraron CC OO y la patronal, que advirtieron de que aún quedan por cerrar temas muy relevantes que pueden hacer descarrillar el acuerdo, según explicó la CEOE a este periódico. Por su parte, Carlos Bravo, el negociador de CC OO, pidió al Gobierno retirar alguna propuesta de jubilación parcial con un impacto de género que «no es razonable». Igualmente, precisó que deben perfilarse las condiciones de trabajo de los relevistas y de los trabajadores que acceden a la jubilación ordinaria, que tiene que atender las condiciones de salida y entrada con el fin de que se produzca un relevo generacional «en las mejores condiciones posibles».
De igual manera, CC OO mostró su malestar con la propuesta de integración de lagunas para los trabajadores fijos discontinuos, donde todavía subsisten diferencias que deben salvarse. En cambio, sí ha habido mejoras en la jubilación anticipada para profesiones peligrosas o penosas, al acceder el ministerio a incluir algún concepto para que se pueda demostrar la penosidad de algunas profesiones, como las camareras de piso o cuidadoras de dependientes, y puedan jubilarse antes sin recortes.
El Gobierno y los agentes sociales continuarán trabajando en las próximas horas para tratar de cerrar un acuerdo lo antes posible.
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