Normalidad en los puertos tras la firma de un preacuerdo que pone fin a la huelga de los estibadores

Los sindicatos de la estiba y la patronal Anesco ratificaron un documento consensuado por las partes que servirá de base para el futuro acuerdo marco -el quinto- al que deberán atenerse los nuevos convenios colectivos de cada uno de los más de treinta puertos españoles, según informó a este periódico la patronal del sector, que hizo hincapié en que el contenido del documento consensuado supone «una evolución en el modelo de la estiba en los puertos españoles y adapta las disposiciones convencionales al nuevo marco jurídico del sector».

Este principio de acuerdo incluye la desconvocatoria de los paros de una hora previstos entre los días 26 y 30 de noviembre, una vez que el pasado viernes se pactó desconvocar la huelga anunciada para este lunes, algo que hubiera supuesto «importantes daños y pérdidas económicas para el conjunto de la economía y, en especial, para la comunidad logística y portuaria», según precisó Anesco. No obstante, este documento deberá recibir ahora el visto bueno de la Dirección General de Trabajo y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para que vea la luz.

Por otro lado, «el avance producido en la comisión negociadora del acuerdo estatal requiere, para la definición final del marco de las relaciones laborales, la adaptación de los convenios de ámbito inferior a la normativa actual vigente», según explicó la patronal. En este sentido, la asociación empresarial invitó a las organizaciones sindicales a «continuar el diálogo en busca de la imprescindible mejora de la competitividad de nuestros puertos».

El plazo fijado para realizar los cambios que adapten el sector al Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea finaliza el próximo 31 de diciembre, por lo que queda poco menos de un mes para cerrar los flecos que falten.

El conflicto en la estiba comenzó a finales de 2014, cuando el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) condenó a España y ordenó que el sector se abriera a la competencia, al considerar que en la práctica opera casi como un coto cerrado por sus propias limitaciones autoimpuestas. Comenzó así un duro proceso de negociación entre Gobierno y sindicatos que coparon las noticias con la convocatoria de huelgas que paralizaron los puertos españoles.

Finalmente, dos reales decretos leyes establecieron la nueva normativa por la que se regulará el sector y que supone su liberalización: primero uno aprobado en mayo de 2017 por el Gobierno del PP que matizó el pasado mes de marzo otro promulgado por el Ejecutivo socialista. Para poner punto y final a este asunto falta la firma de un convenio que aborde la subrogación de estibadores y fije las condiciones para las prejubilaciones, para las que el anterior Ejecutivo pactó una serie de ayudas para amortiguar los efectos de la reestructuración en el empleo, algo que, con este nuevo documento, está ya muy cerca. Por estos nuevos convenios se regirán los casi 6.500 estibadores que hay en la actualidad, aunque el sector da empleo a más de 12.000 personas.