El Ibex-35 suma un 0,44% en la sesión y cae un 0,07% en la semana

En el resto de Europa también dominaron los ascensos. El Ftse 100 británico fue, de lejos, el mejor, con una subida del 1,22%. Mientras, el Cac 40 francés y el Dax alemán se anotaron un 0,20%, y el PSI-20 de Lisboa, alrededor de un 0,15%. El único índice que cerró a la baja fue el Ftse Mib de Milán, que perdió un 0,09%.

Los avances en Europa se vieron acompañados de una fotografía económica mixta: si bien el índice de gestores de compras del sector industrial superó expectativas al subir de los 45,9 a los 46,6 puntos, cuando los analistas habían previsto que se situara en los 46,4 puntos, el indicador del sector servicios se situó por debajo de lo esperado, aunque todavía en zona expansiva, es decir, por encima de los 50 puntos. Si bien parece que la industria podría haber tocado suelo, el contagio al sector servicios parece aún en marcha.

De vuelta en el selectivo español, ArcelorMittal fue el mejor valor del día, con una subida del 6,38%. Le siguió Mediaset, con una revalorización del 3,87%. Meliá y Bankinter ganaron alrededor de un 2,2% y Bankia, un 1,9%, seguida inmediatamente de Acerinox, que avanzó un 1,82%. Otro buen puñado de valores se revalorizaron más de un punto porcentual: Acciona, Cie, Viscofán, Telefónica, Santander, IAG y Repsol.

Valores cíclicos, bancos y algún que otro 'blue chip', por tanto, apuntalaron las ganancias del selectivo.

En negativo, Cellnex fue el peor, con un retroceso del 1,32%. A continuación se colocó Merlin Properties, que bajó un 1,09%. Siemens Gamesa, por su parte, cayó casi un punto porcentual. Pero pocos valores más cerraron en rojo y la mayoría de ellos tenía sesgo defensivo, como las 'utilities' Naturgy, Red Eléctrica, Endesa y Enagás.

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, destacó Dia, con una subida del 18,15%, en la segunda jornada de celebración de la culminación de su ampliación de capital. En la jornada de ayer se había apuntado casi un 40%. En rojo, el peor fue Deoleo, que bajó un 10,67%.

Esos ascensos de hoy en la Bolsa española, aunque casi generalizados en el Viejo Continente, no venían acompañados por los de Wall Street. Así, el Dow Jones, al cierre de la sesión europea, se anotaba alrededor de un 0,15%, mientras que el S&P 500 bajaba cerca de un 0,10% y el Nasdaq retrocedía un 0,15%. Pero, parecía que conforme pasaban los minutos los indicadores se iban reforzando.

Los datos económicos que conocimos durante la sesión en Estados Unidos fueron buenos: el índice de gestores de compras del sector industrial americano se colocó por encima de lo esperado, y también el del sector servicios. Y, además, el índice de confianza del consumidor que elabora la Universidad de Michigan batió las expectativas del consenso de analistas. Ello favoreció la apreciación del dólar contra el euro.

Pero el comportamiento de la Bolsa venía condicionado de nuevo por las noticias sobre la guerra comercial. Así, el presidente chino Xi Jinping afirmó que su país quiere trabajar por un acuerdo con Estados Unidos que esté basado en parte en la igualdad, un principio que el presidente Donald Trump aseguró que no comparte, puesto que, en su opinión, Estados Unidos parte de una situación de desventaja en las relaciones comerciales con China. Todo ello muestra que sigue habiendo muchas diferencias entre las dos potencias y que seguirá siendo difícil que alcancen un acuerdo a corto plazo. Aunque Trump expresó, pese a sus críticas, optimismo respecto a que pueda ser posible un pacto: «Tenemos una gran oportunidad de llegar a un acuerdo». Privadamente, negociadores de ambas partes han estado hablando regularmente en los últimos días, tratando de limar las diferencias en cuestiones tales como las compras de bienes agrícolas por parte de China o sobre su respeto a los derechos de propiedad intelectual. Pero aún hay mucha tela que cortar respecto a qué aranceles exactamente retirará cada país como ingrediente necesario del acuerdo.

Aunque los mercados no se han tomado muy mal la decepción que supone que aún no haya acuerdo comercial firmado, cuando hace tan solo un mes parecía hecho, en realidad los índices de Wall Street se preparan para cerrar su primera semana en negativo desde octubre. A las seis de la tarde, las pérdidas acumuladas por los indicadores americanos en las cinco últimas sesiones rondaban el medio punto porcentual.

Y los números rojos también dominaron el balance de las cinco últimas sesiones en los índices europeos, con la sola excepción clara del Ftse 100 británico, coincidiendo con la semana en la que el Partido Laborista ha presentado un ambicioso programa electoral en términos de ingresos e inversiones públicos. Pero es que el Partido Conservador va primero en las encuestas.

El índice español termina la semana con una mínima caída del 0,07%. En verde, el mejor, Sabadell, que subió un 3,89% en el conjunto de la semana. Y no fue el único banco entre los diez mejores del Ibex-35: también estuvieron ahí Bankia, Bankinter, CaixaBank y Santander.

En rojo, el peor, Ence, con una caída del 5,72%, seguido de Cie Automotive y Siemens, también con descensos de más de un 5%.

Peores registros tuvieron otros indicadores bursátiles: el Ftse Mib de Milán bajó un 1,39%, mientras que el Cac 40 francés bajó un 0,78% y el Dax alemán se dejó un 0,59%.