El Ibex-35 cierra en máximo anuales y casi en los 9.200 puntos

El selectivo español chocó, como en algunos de los días anteriores, con los máximos anuales que marcaba en los 9.185 puntos hace casi un mes. Aunque al final logró rebasarlos y, por lo tanto, terminar el día en los niveles más altos del año. Quizás la verdadera resistencia que al selectivo español le está costando sobrepasar está en los 9.200 puntos.

En el Viejo Continente, el mejor indicador de todos fue el Dax alemán, que se anotó un 0,19%. El Cac 40 francés cerró en tablas. En rojo, el peor fue el Ftse 100 británico, que perdió un 0,85%, ante las dificultades que están encontrando el Reino Unido y la Unión Europea en sus nuevas conversaciones, con lo que la probabilidad de un 'brexit' sin acuerdo aumenta. El Ftse Mib de Milán, por su parte, se dejó un 0,47%. El PSI-20 de Lisboa, mientras, perdió un 0,32%.

Para el indicador doméstico fue fundamental que (como premio a sus buenos resultados) e Iberdrola terminaran con ganancias de un 1,21% y de un 1,07%, respectivamente. Sólo les superó en rentabilidad Enagás, que se anotó un 1,91%. Acciona también sumó más de un punto porcentual.

En rojo, Indra fue el peor de todos, con un recorte del 1,40%. Merlin Properties y Grifols se dejaron alrededor de un 1,30%. Viscofán y Meliá también bajaron más de un punto porcentual. Y Ferrovial perdió justo un 1%. En negativo, algunos 'blue chips': BBVA, Inditex y Repsol, que se dejaron, por ese orden, un 0,25%, un 0,20% y un 0,01%.

En Europa, los datos económicos no fueron positivos. El índice de gestores de compras del sector industrial cayó desde los 50,5 hasta los 49,2 puntos, presionado por el fuerte deterioro sufrido por Alemania. Situarse por debajo de los 50 puntos implica contracción de la actividad. En cambio, el índice del sector servicios mejoró desde los 51,2 hasta los 52,3. Ello dio lugar a una mejora del indicador compuesto desde los 51 hasta los 51,4 puntos.

En Wall Street, números rojos. Al cierre de la sesión europea, el Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq registraban pérdidas de entre un 0,3% y un 0,5%. Ello, después de la publicación de malos datos económicos en Estados Unidos. Aunque los indicadores de empleo continúan siendo favorables, hubo otros que se comportaron más débilmente. Así, los pedidos de bienes duraderos crecieron un 1,2% en diciembre, por debajo del 1,7% anticipado por los analistas.

Los índices de gestores de compras ofrecieron una lectura mixta: el de fabricación bajó desde los 54,9 hasta los 53,7 puntos, cuando se esperaba que se situaran en los 54,8 puntos; pero, para compensar, como ha ocurrido también en la zona euro, el del sector servicios mejoró por sorpresa desde los 54,2 hasta los 56,2 puntos. Las referencias fueron malas en el mercado inmobiliario: prosiguieron las caídas en las ventas de viviendas. Y el indicador de indicadores, que proporciona una lectura general sobre la situación económica, retrocedió un 0,1% en enero, frente al avance del 0,1% previsto.

Los inversores están pendientes tanto de la macro como de las negociaciones comerciales, después de que los índices hayan registrado un potente rebote en los últimos casi dos meses, desde los mínimos que marcaron a finales del mes de diciembre.

En el mercado de divisas, el tipo de cambio entre el euro y el dólar se mantenía en el entorno de 1,133 unidades. Pese a las referencias económicas tan regulares, vimos subidas en las rentabilidades de los bonos. El interés del título americano a diez años avanzó desde el 2,65% hasta el 2,69%. El rendimiento de su comparable alemán pasó desde el 0,10% hasta el 0,13%.

El rendimiento del bono español a diez años se mantuvo en el 1,20%. Con ello, su prima de riesgo se estrechó desde los 110 hasta los 107 puntos básicos. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, encadenaba su séptima sesión consecutiva de ascensos: al cierre, se anotaba un 0,25%, hasta rebasar los 57 dólares por primera vez desde el 12 de noviembre. El barril de Brent, de referencia en Europa, se anotaba un 0,15%, hasta los 67,20 dólares.