El Ibex salva la sesión 'in extremis' con un avance del 0,14%

Esa reducida subida que tuvo el selectivo español y la recuperación de terreno que al final tuvieron todos los indicadores europeos se debió en parte a la mejora progresiva que también observamos en Wall Street desde la apertura y hasta el cierre de las plazas del Viejo Continente. Así, los principales indicadores de la Bolsa de Nueva York ganaban alrededor de un 0,20% al término de la sesión europea después de haber arrancado en rojo.

Aunque no toda Europa logró cerrar en verde. Junto a las del selectivo español, sólo hubo ganancias para el Cac 40 francés, que se anotó un 0,27%. En rojo, en cambio, terminó el Ftse Mib de Milán, que recortó un 0,3%, mientras que el Dax alemán se dejó un 0,13% y el Ftse 100 británico, un 0,08%.

Si a media sesión apenas media docena de los valores del Ibex-35 aguantaban en verde, en el último tramo de la sesión se fueron sumando muchos más. Los mejores al cierre fueron dos de los grandes: Repsol, que ganó casi un 2%, y Amadeus, que se anotó un 1,49%. Naturgy, por su parte, sumó un 1,02%. Después se colocó Acciona, que se apuntó un 0,95%. Entre los grandes, también cerraron en verde aunque con avances más discretos Iberdrola (0,22%), BBVA (0,19%) e Inditex (0,04%).

En rojo, el peor fue Mediaset, que borró la subida de ayer a cuenta del rumor sobre una posible opa de su matriz italiana al caer un 7,45%. Después se colocó ArcelorMittal, que retrocedió un 2,06%. Técnicas Reunidas y Dia, mientras, se dejaron un 1,52% y un 1,19%, respectivamente.

La guerra comercial sigue su curso y en la jornada de hoy supimos que China le pedirá permiso a la Organización Mundial del Comercio para imponer sanciones a Estados Unidos por incumplir un dictamen en una disputa sobre aranceles antidumping. Y ello, mientras el mundo está pendiente de los aranceles con que ha amenazado Estados Unidos que sumarían, con los que ya están en marcha, bienes chinos por valor de más de 500.000 millones de dólares objeto de tarifas, a lo que Pekín también respondería.

Las Bolsas, incluida la española, la más expuesta al mundo emergente, tuvieron que hacer frente además a una nueva caída de las divisas de la región. Especialmente, a las de los países latinoamericanos: a media tarde, el real brasileño bajaba un 1,85%, mientras que el peso argentino retrocedía un 1,5% y el peso chileno, alrededor de medio punto porcentual.

El tipo de cambio entre el euro y el dólar, mientras, se mantenía plano por debajo, pero cerca, de 1,16 unidades.

En el mercado de deuda vimos subidas de las rentabilidades de todos los bonos. Los intereses de los títulos estadounidenses a diez años pasaron del 2,93% hasta el 2,96%, sus niveles más altos desde principios del mes de agosto. El rendimiento de los títulos alemanes a diez años pasó del 0,40% hasta el 0,42%.

Ello, después de buenos datos en Estados Unidos. Sobre todo los de empleo, en particular de las ofertas de empleo del mes de julio, que superaron las expectativas. También fue favorable el indicador que mide el optimismo de las pequeñas empresas.

Con la subida del dólar y de los tipos americanos, los intereses de los títulos de los países emergentes se disparaban: la rentabilidad del bono brasileño a diez años en dólares pasaba del 6,08% hasta el 6,20%; el de su comparable argentino, del 10,26% hasta el 10,37%.

En las emisiones en moneda local, la situación era peor: la rentabilidad del bono turco a diez años pasaba del 18,90% hasta el 19,20%; y la de su comparable brasileño, del 12,35% al 12,46%,

En el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, subía un 2%, hasta rozar los 79 dólares. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, ganaba un 0,18%, hasta los 67,6 dólares. Este avance, debido al Huracán Florence que empieza a amenazar la costa este de Estados Unidos.

El oro, mientras tanto, retrocedía un 0,18%, hasta los 1.193 dólares la onza.