El Ibex supera los 8.700 puntos en máximos de más de un año

En concreto, el selectivo despide la sesión en 8.711 puntos, máximos de 13 meses, gracias al tirón alcista de Indra y Meliá Hoteles, que lideran la parte alta de la tabla con subidas del 3,5% pero, sobre todo y por su mayor peso en el indicador, del sector bancario.

BBVA destaca con un repunte de más del 3,4% al cierre que deja su cotización en 4,51 euros por acción. La entidad, que este martes celebra su junta de accionistas, se ha visto respaldada por la decisión de Barclays de elevar su precio objetivo de 4,4 euros a 4,6 euros por acción.

En el apartado de recomendaciones, Cellnex también destaca con subidas de más del 1% después de que los analistas de HSBC hayan elevado su precio objetivo hasta los 61 euros por acción, muy por encima de los 45,64 euros en los que actualmente cotiza la compañía.

Las subidas también rondaron el 3% en Santander y el 2,5% Banco Sabadell, mientras que Bankinter y CaixaBank repuntan también un 1,5% al cierre. El sector también ha contado a su favor con un giro alcista en la rentabilidad de los bonos a largo plazo, una tendencia que beneficia a su negocio, en una semana en la que la principal referencia será la reunión del Banco Central Europeo (BCE).

Según explican los analistas de Link Securities, no se espera que el organismo vaya a modificar ninguno de los principales parámetros de su actual política monetaria, aunque sí que la presidenta de la institución, Christine Lagarde, responda a las dudas sobre cuándo se comenzará a limitar el ritmo de compras mensuales de activos en los mercados secundarios de deuda.

Bajo este escenario, la rentabilidad del bono español a diez años (que se mueve de manera inversa al precio) se recuperaba al 0,42% desde el 0,38% en el que había iniciado la sesión, mientras el rendimiento del bono americano también repuntaba al 1,61% desde el 1,57% de los primeros compases de negociación en los mercados.

Los inversores también siguen centrados en la evolución de las cuentas trimestrales en EEUU, que cogen ritmo de crucero con algo más de 400 compañías publicando esta semana (entre ellas, 72 integrantes del S&P 500). Europa recoge ahora ese testigo y, en el caso español, el protagonismo será para Enagás, el martes, y para Bankinter, el viernes. Citas empresariales que deberían servir de base para que el Ibex consolide sus máximos anuales.

Un impulso en el que este lunes han fallado algunos los valores más ligados al ciclo, como Cie Automotive o ArcelorMittal, acompañando con caídas del 2% a Solaria y Fluidra en la parte roja del Ibex 35.

Con el cruce euro/dólar en 1,1980 unidades, el precio del petróleo Brent, de referencia en Europa, cede de forma suave hasta los 65,63 dólares, mientras que el West Texas (EEUU) se sitúa por debajo de los 63 dólares el barril.

Fuera del BCE y de los resultados empresariales, una noticia se ha colado este lunes en los parqués mundiales agitando la cotización del sector deportivo: la del acuerdo alcanzado entre 12 de los mayores equipos de fútbol para la creación de la Superliga.

Los títulos de la Juventus se han disparado un 17,85% en la jornada hasta los 0,91 euros por título, máximos de siete meses. El Manchester United, que cotiza en Wall Street, registraba también subidas de cerca del 10% al cierre de los mercados europeos.

Otros equipos cotizados que no forman parte del acuerdo también han repuntado en bolsa. Es el caso del Borussia Dortmund, cuyas acciones se han disparado también un 11% en la bolsa alemana pese a haber trasladado ya su negativa a la propuesta. El índice Stoxx Europe Football, en el que se agrupan los principales clubes cotizados de la región, también recoge la noticia con fuertes subidas del 2,6%.

Sin embargo, los expertos advierten de la elevada volatilidad que suele acompañar a este tipo de cotizadas, cuya evolución en el parqué no depende tanto de factores económicos directos, sino de eventos puntuales, como los resultados del equipo, la consecución de títulos, los fichajes o ventas o la gestión económica del club.

Los analistas de Barclays advierten, sin embargo, que hay que tomar el anuncio con cierta prudencia. En un informe publicado este mismo lunes, muestran dudas en torno al proyecto, como qué pasará con los derechos de emisión para los próximos años en competiciones como la Champions y la Europa League. «Hay que comprobar si los términos de los contratos permitirían a los operadores devolver los derechos de la Liga de Campeones a la UEFA si la competición pierde a 12 de sus mejores clubes», advierten.

En este sentido, apuntan a empresas afectadas como las británicas Sky o BT o la propia Telefónica en España. «El impacto sería significativo para los operadores de televisión de pago», añaden, señalando a la francesa Vivendi, y su filial Canal+, como la más afectada si los derechos de la Superliga costaran lo mismo que la Champions (estimados en unos 200 millones de euros). El 9% de su Ebitda estimado para 2022.

Del mismo modo, consideran que habrá un impacto negativo en otras firmas como Mediaset España y a los jugadores de los equipos fundadores se les impide jugar en Eurocopa, dado que tienen los derechos de transmisión.