El Ibex choca con los 8.900 puntos en su senda alcista

Los inversores tratan de digerir nuevas referencias macroeconómicas que llegan de China, una de las claves que marcará el devenir del mercado en 2023 ante las dudas en torno al ritmo de recuperación económica del gigante asiático. Según los datos publicados este martes, el PIB del país creció un 3% el pasado año, muy por debajo del objetivo del 4,4% y del 8,1% de 2021.

Sin embargo, el dato del último trimestre del año deja la puerta abierta a la esperanza, con una cifra prácticamente plana de crecimiento, mejorando la expectativa de que se registraría una contracción del 0,8%, coincidiendo con los primeros signos de reapertura económica tras la pandemia.

A la espera de las cifras de los próximos meses, los resultados empresariales han retomado todo el protagonismo de la mano de la gran banca de Wall Street. El martes se conocieron los datos de Morgan Stanley, que batieron las expectativas con un beneficio de 2.236 millones en el cuarto trimestre. Para el conjunto del año, no obstante, las ganancias caen un 27% hasta los 10.182 millones. Por su parte, otro de los gigantes del sector, Goldman Sachs, ganó 10.764 millones en 2022, un 49% menos que el año anterior. Unas cuentas que no sentaron bien al otro lado del Atlántico, con sonoras caídas en Wall Street al cierre de los mercados europeos.

Los inversores también acogieron con alivio una nueva emisión de deuda a corto plazo del Tesoro que, de nuevo, repite con una fuerte demanda, aunque a cambio de intereses máximos de la última década. En todo caso, las letras se afianzan como una de las grandes alternativas a los depósitos para los ahorradores.

En concreto, el Tesoro ha adjudicado 1.532 millones de euros en letras a nueve meses a un interés del 2,83%, desde el 2,33% de la subasta anterior al mismo plazo y marcando un nuevo máximo desde que se realizan este tipo de emisiones (2013). Por otro lado, se han colocado 520 millones en letras a tres meses al 2,18%, el tipo más alto desde 2012.

Mientras, en el mercado de materias primas, el barril de crudo Brent sube casi un 1% hasta superar los 85 dólares, mientras que el West Texas estadounidense ronda los 79,95 dólares.