Criptoactivos y falsos 'influencers': la CNMV detectó 394 chiringuitos financieros en 2023

Toque de atención para los inversores, que deben tener especial cuidado si se acercan al mercado sin contar con la formación necesaria. El boca a boca, las recomendaciones de familiares y amigos o los falsos 'influencers' vuelven a proliferar con fuerza, tal y como evidencia el Informe Anual de la CNMV correspondiente a 2023, un periodo en el que el supervisor detectó 394 chiringuitos financieros, entidades no autorizadas que, bajo la promesa de grandes rentabilidades con escaso esfuerzo, intentan atraer al minorista.

La cifra es inferior a las 508 entidades no registradas que se alcanzó de máximo en 2021, pero implica un crecimiento del 17,3% respecto a las detectadas en 2022.

Los tipos de fraude cometidos por estos chiringuitos son viejos conocidos del supervisor. «Las entidades no autorizadas siguen recurriendo a la oferta de productos y servicios aparentemente sofisticados que, en muchos casos, no se corresponde con un servicio real, sino con meras promesas para captar fondos del público sin contrapartida alguna», advierte la CNMV.

En ese sentido, el organismo presidido por Rodrigo Buenaventura detectó cómo el pasado año estas entidades ajustaron sus productos al entorno de los criptoactivos. También intentaron captar clientes con una oferta supuestamente basada en sistemas de inteligencia artificial (IA), «una manifestación adicional del abuso por parte de estas entidades del léxico de moda en cada momento para captar el interés —y los fondos— de los inversores», indican.

En este sentido, la CNMV mantuvo el foco en algunas campañas publicitarias falsas, también a través de redes sociales, en las que se suplantaba la identidad de personajes populares -como periodistas, actores o cantantes- para intentar atraer a posibles inversores, empleando sistemas de IA para reforzar la veracidad de sus testimonios en falsas entrevistas en medios de reconocida credibilidad.

No solo se trata de atraer clientes. La finalidad de estos chiringuitos también era obtener datos personales de potenciales inversores, como teléfonos y direcciones de contacto, para comercializarlas después entre entidades no autorizadas.

Con este telón de fondo, la CNMV recibió el pasado año 1.364 reclamaciones de los inversores, aunque estas tuvieron más que ver con la operativa habitual con entidades registradas. Las más habituales, las relativas a comisiones cobradas o las deficiencias en la información previa a la contratación de un producto.

De la cifra total, en el 25,8% de los casos la entidad llegó a un acuerdo con los afectados. Y solo un 36,9% obtuvieron un informe favorable al reclamante. Y de ese porcentaje, un 80% de las entidades rectificó su actuación o aceptó el coste de la reclamación.

En total, la CNMV abrió 17 nuevos expedientes sancionadores en 2023, tan sólo tres más en comparación con 2022, si bien el importe propuesto de las multas alcanzó los 12,75 millones de euros, seis veces que un año antes.

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