Las acciones del Santander se recuperan un 2% tras la caída por la cuenta de Irán

Al desplome de ayer le sigue ahora un avance que, en cualquier caso, no logra cubrir todas las pérdidas bursátiles acumuladas en una sola jornada en la que Santander llegó a dejarse más de 3.000 millones de euros de capitalización bursátil por el problema iraní. Esta caída de la primera entidad financiera española por volumen de negocio provocó un retroceso del Ibex-35, que se dejó más de un 1,20%. Este martes, el selectivo español avanza lentamente un 0,4%.

A pesar de estas informaciones, Banco Santander defendió ayer que la entidad «no ha incumplido la normativa estadounidense sobre sanciones impuestas a terceros de acuerdo con nuestra investigación», indican fuentes de la entidad. «El banco cuenta con políticas y procedimientos para asegurar que se cumplen los requisitos relativos a las sanciones», insisten, dejando claro que «Santander continuará colaborando proactivamente con las autoridades británicas y y estadounidenses pertinentes».

Otra parte de las miradas de la Bolsa se encuentra hoy centrada en Grifols. Sus títulos avanzan casi un 2% después de que la compañía decidiera este lunes (después de que los mercados bursátiles cerraran) que separará la gestión de la propiedad de la compañía, y que nombrará como consejero delegado a partir del 1 de abril a Nacho Abia. Este mismo martes, la corporación también ha anunciado que Albert Grifols Coma-Cros deja de tener la categoría de consejero ejecutivo y pasa a ser consejero dominical.

Estos cambios forman parte de una estrategia de gobierno corporativo «planificada e iniciada en 2022», según aclara la compañía, impulsada por Raimon Grifols y Víctor Grifols Deu junto con el consejo de administración de la multinacional, que sufrió acusadas caídas en la Bolsa tras el informe de la firma Gotham.

Fue a principios de enero cuando esta firma publicó el polémico informe en el que acusa a la firma de realizar cierta ingeniería financiera para ocultar deuda. Aunque el consenso de analistas no otorgaba una veracidad del cien por cien al informe de Gotham, sí mostraban su preocupación por el elevado endeudamiento de Grifols y, sobre todo, por los abultados vencimientos que afronta la corporación a medio plazo.

Desde entonces, las acciones de Grifols han perdido un 25% de su valor bursátil, al caer desde los 14,25 euros en los que se encontraban el día de la publicación de Gotham hasta los poco más de 10 euros en los que cotizan este martes.