Las Bolsas caen con el dólar mientras el Ibex-35 cierra enero con un declive del 0,39%

Precisamente, son las dos plazas que enfrentan los riesgos políticos más inmediatos, además de otros, como el financiero en el caso de Italia. También el Ftse 100 británico termina en rojo un mes en que ha quedado claro que el Gobierno británico apuesta por el 'Brexit' duro. En este contexto, el Ibex-35 termina con un descenso de un 0,39%. Ha sido, de esta manera, el segundo mejor indicador de Europa tras el Dax alemán, que ha terminado con un avance de medio punto porcentual. 

El mes de enero acaba en rojo en el Ibex-35 y lo mismo ha ocurrido en la última sesión, en que el selectivo se ha dejado un 0,49%, para dar un último cambio en los 9.315,20 puntos. Firma el Ibex-35 el tercer mejor cierre del día en el Viejo Continente, tras el PSI-20 de Lisboa, que se dejó un 0,14%, y al Ftse 100 británico, que perdió un 0,27%. El peor de todos fue el Dax alemán, que retrocedió un 1,25%. El Ftse Mib de Milán cayó un 0,90%, mientras que el Cac 40 francés perdió un 0,75%.  

En el selectivo español, en la sesión, Dia encabezó las ganancias, con una revalorización del 2,54%. A continuación se colocó Iberdrola, con un avance del 0,57%. Después se situaron ACS y Acerinox, con ganancias de alrededor de un 0,35%. Enagás y Grifols completaron la lista de valores en verde. 

En rojo, ArcelorMittal fue el valor que más cayó, con un descenso del 2,70%. Después, IAG, que bajó un 2,51%. Meliá, Técnicas Reunidas, el Santander y Aena perdieron más de un punto porcentual. Entre los grandes, Repsol también se colocó entre los peores, con una caída del 0,76%. BBVA, por su parte, se dejó un 0,60%. Inditex y Telefónica perdieron alrededor de un 0,35%. 

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Inmobiliaria del Sur fue el valor más rentable, con un avance del 7,29%, seguido de Pharma Mar, que se anotó un 4,15%. En rojo, Quabit fue el peor, con una caída de cerca del 15%. En el primer mes del año, IAG ha sido el valor más rentable del Ibex-35, con una revalorización del 8,20%. CaixaBank y Meliá han ganado más de un 7%. En rojo, los peores, Red Eléctrica, Iberdrola y Enagás, con descensos de entre un 8% y un 6%. 

En el Eurostoxx 50, el peor del mes ha sido Intesa SanPaolo, con un descenso del 10,55%, seguido de Nokia, que ha sufrido un descenso del 9,55%. En verde, Volkswagen ha sido el mejor, con una subida del 7,91%, mientras Deutsche Bank y E.On. ganan más de un 6%.

Wall Street y el dólar, a la baja

En Wall Street dominaban los descensos tras las pérdidas que también se anotó ayer, ante la preocupación que comienza a despertar la Administración Trump por su proteccionismo y medidas anti-inmigración. La Bolsa americana lleva ya tres días consecutivos de pérdidas. De tocar los 20.100 puntos el Dow Jones ha pasado a colocarse en los 19.830 puntos. En la jornada de este martes lo que enturbió la evolución de los mercados fue que un consejero del Gobierno americano, Peter Navarro, afirmara que el euro está infravalorado, mientras que el propio presidente apuntaba que China y Japón planifican sus mercados monetarios.

Si alguien pensaba que el presidente americano quería un dólar fuerte, parece que eso está muy lejos de sus intenciones reales. Así, el euro avanzaba un 0,83% respecto al billete verde, para colocarse el tipo de cambio en 1,0784 unidades. Con respecto al conjunto de principales divisas, el dólar bajaba un 0,83%. El billete verde lleva cayendo respecto a la cesta de monedas más importantes desde que comenzó el año, corrigiendo en gran medida el avance que acumulaba desde la victoria de Donald Trump. De hecho, se encuentra ya en mínimos desde mediados de noviembre.  

Veremos mañana qué hace la Reserva Federal norteamericana, porque ello también afectará al tipo de cambio. De acuerdo con Anna Stupnytska, economista global de Fidelity International, "no es muy probable que la Reserva Federal realice ningún cambio significativo en la reunión del 1 de febrero, pues no habrá conferencia de prensa. Mientras que puede que haya quien busque señales sobre una posible subida de tipos en marzo, existe poca presión sobre la Fed para que modifique el rumbo en este punto.

Aunque los datos han aguantado bien desde la reunión de diciembre, el PIB del cuarto trimestre de 2016 se situó ligeramente por debajo del consenso de mercado, en el 1,9% anualizado, y la inflación subyacente aún no ha superado el rango del 1,7% anual. Por tanto, la Fed querrá mantener por ahora abiertas sus opciones. Esta estrategia tiene sentido en el actual entorno de incertidumbre política, sobre todo en lo que respecta a la magnitud de un potencial estímulo fiscal".