El Ibex-35 aguanta los 8.600 con la ayuda de Wall Street

Los mercados están ajustándose a esa nueva realidad, aunque sin dramatismos. Si el viernes Europa cerró en verde, porque no le dio tiempo a escuchar el mensaje más agresivo de Fischer, y Wall Street terminó en negativo, porque sí llegó a ser consciente de que los tipos pueden subir el mes que viene, hoy se da la vuelta a esa ecuación. En el buen comportamiento de la Bolsa de Nueva York, que iba a mejor a medida que pasaban las horas, también influía la agenda macroeconómica de la sesión, con la publicación de los datos de ingresos y gastos personales del mes de julio. En términos reales, los gastos superaron expectativas y encadenan ya cuatro meses consecutivos de expansión. Aunque ni las pérdidas ni los números verdes han sido en ningún caso muy grandes, lo que implica que el grado de preocupación de los inversores no es alarmante. De hecho, el S&P 500 se encontraba al cierre de la sesión europea a apenas ocho puntos de sus máximos históricos. Puede jugar a favor de la Bolsa que esas subidas de tipos que anticipa la Reserva Federal norteamericana estén soportadas por una economía en saludable expansión económica. Un hito muy importante para anticipar si finalmente la Fed se atreverá a elevar el precio oficial del dinero será el informe oficial de empleo del mes de agosto que se publicará el próximo viernes.

Japón puso su granito de arena para mejorar el ánimo del mercado: el índice Nikkei de Tokio se disparó un 2,30% después de que el gobernador de la autoridad monetaria del país, Haruhito Kuroda, afirmara que se incrementarán los estímulos si así se requiere.

En el Viejo Continente, la primera parte de la sesión fue un poco movida, aunque dentro de un rango muy estrecho: el Ibex-35 comenzaba el día en los 8.600 puntos, entraba casi en verde a las nueve y media de la mañana, pero a partir de las doce de la mañana se estabilizaba en el entorno de los 8.580 puntos, pero con el buen tono que mostraba Wall Street, el selectivo salvaba los 8.600 puntos.Al cierre cedía un 0,5%, hasta los 8.616 puntos. Más que el selectivo español sólo perdió el Ftse Mib de Milán, que retrocedió un 1,12%. El Dax alemán y el Cac 40 francés se dejaron alrededor de un 0,40%. El PSI-20 de Lisboa terminó el día prácticamente en tablas. La Bolsa de Londres cerró por festivo y ello se notó en la relativa tranquilidad de la sesión.

Solo cuatro valores esquivan los recortes

Pese a que el recorte sufrido por el selectivo español no fue muy importante, apenas cuatro valores del índice se salvaron de los números rojos. Aena fue el que más ganó, con una subida del 0,55%, seguido de Cellnex, que se apuntó un 0,26%. Bankia, por su parte, ganó un 0,14%. También esquivó las pérdidas Merlin Properties, aunque sólo fue capaz de cerrar la sesión en tablas.

En negativo, ArcelorMittal fue el peor, con un recorte del 2,74%. Después se colocó Acerinox, que cedió prácticamente dos puntos porcentuales, casi lo mismo que el Popular. Entre los peores, también Técnicas Reunidas, que se dejó un 1,72%. Más de un punto porcentual cedieron también Acciona, Repsol, el Sabadell, IAG y Meliá. A excepción de la petrolera, la mayor parte de 'blue chips' cedieron menos de un punto porcentual. Así, Iberdrola se dejó un 0,22%, mientras BBVA cayó un 0,29%. Santander e Inditex retrocedieron alrededor de un 0,4%. Ello hizo posible que la foto final del selectivo no fuera excesivamente negativa.

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Urbas encabezó los ascensos, al anotarse un 9%. Pharma Mar se colocó después con una revalorización del 7%. En rojo, las pérdidas más importantes fueron para Biosearch, eDreams, Sniace, Ence e Inypsa, que se dejaron más de un 3%.

En el Eurostoxx 50, apenas siete valores terminaron la jornada en verde y los más rentables fueron Essilor, ASML, Airbus y Danone, cuyos ascensos rondaron el medio punto porcentual.

Divisas, materias primas y mercado de deuda

En el mercado de divisas, el euro continuaba a la baja con respecto al billete verde. La moneda comunitaria retrocedía un 0,23% frente al dólar, hasta el nivel de 1,1172 unidades. Antes de las palabras de Yellen el viernes en la reunión de banqueros centrales en Jackson Hole se cambiaba por alrededor de 1,13 dólares. La divisa estadounidense ganaba posiciones respecto a las principales monedas mundiales, no sólo respecto al euro, según reflejaba el American Dollar Index.

El efecto secundario de la apreciación del dólar es la caída del precio del crudo. El barril de Brent, de referencia en Europa, retrocede un 1,5%, hasta los 49,18 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, cae un 1,60%, hasta los 46,88 dólares. El oro, en cambio, rebotaba un ligero 0,22%, hasta los 1.324 dólares después de seis sesiones consecutivas de pérdidas. Sobre el crudo, además del dólar, pesaban también las dudas respecto a que los países productores sean capaces de llegar a un acuerdo para estabilizar el mercado en la reunión que mantendrán a final de mes.

En el mercado de deuda, se corrige en parte la subida de las rentabilidades que tuvo lugar el viernes al término de la sesión: así, el rendimiento de los títulos americanos a diez años retrocede desde el 1,63% hasta el 1,59%, mientras que el de los títulos alemanes pasa del -0,07% al -0,08%. El interés del bono español baja desde 0,94% hasta el 0,92%.