El Ibex lidera los ascensos en Europa, pero no recupera los 9.000

ArcelorMittal y el Popular encabezaron los ascensos, con ganancias de un 5,30% y de un 5,23%, respectivamente. Los derechos para acudir a la ampliación de capital del Popular ganaron otro 38,67%. Después se colocó Sacyr, que se apuntó un 3,91%. Acerinox, mientras, se apuntó un 3,60%. Después, IAG, que ganó cerca de dos puntos porcentuales. CaixaBank, Dia, Indra, Bankia y Amadeus completaron la lista de valores con ganancias de más de un 1%. En los grandes, entre los mejores, el Santander, que ganó un 0,77%. Telefónica, por su parte, se anotó un 0,33%. Iberdrola terminó el día con un repunte del 0,27%. Repsol se salvó de los recortes, con su avance del 0,09%.

En negativo, Merlin Properties fue el peor, con un descenso del 1,59%. Después, Bankinter, que perdió un 0,60%. A continuación, Técnicas Reunidas, que se dejó un 0,42%. Mediaset, Aena, Red Eléctrica y Enagás perdieron entre un 0,3% y un 0,2%. Grifols, Inditex y FCC completaron la lista de valores en negativo. Tampoco BBVA se unió a los ascensos, dado que terminó la jornada en tablas.

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Renta Corporación encabezó los ascensos, con una subida del 13,44%. En negativo, Sniace fue el peor, con una caída del 6,02%.

Coca-Cola European terminó la sesión cambiándose por 35,95 euros, lo que supone una subida del 1%.

Referencias económicas del día

La jornada venía cargada de referencias económicas. En primer lugar, contábamos con referencias de Estados Unidos: tras el cierre de la sesión anterior, se conoció el Libro Beige de la Reserva Federal, de acuerdo con el cual se observan tensiones inflacionistas en el mercado de trabajo. Ya en la sesión, conocimos el dato de paro del mes de mayo en España: bajó en casi 120.000 personas, cuando se esperaba una reducción en casi 105.000 personas. Más avanzada la sesión tenía lugar la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo. La institución dejó sin cambios los tipos de interés y anunció que a partir del 8 de junio comenzará con las compras de deuda privada. Quizás lo que no sentó del todo bien fue que el presidente del Eurobanco, Mario Draghi, comunicara una elevación de sus previsiones de crecimiento y de inflación (aunque ésta no llegará al 2% en que se sitúa su objetivo en los dos próximos años) para la zona euro, así como un ligero tono menos benévolo que otras veces, al considerar que los riesgos a la baja están retrocediendo. Tampoco gustó demasiado que no abriera el grifo de la liquidez a Grecia.

Aunque para interpretar el movimiento de los mercados, no podíamos fijarnos únicamente en el Banco Central Europeo, porque también había noticias relevantes procedentes de Estados Unidos. El mercado de trabajo cumplió expectativas. Al menos, el privado, el que mide la agencia ADP: durante el mes de mayo se crearon 173.000 nuevos empleos, de acuerdo con lo esperado. Éste es un aperitivo al informe oficial de empleo que se conocerá mañana: se espera que revele una caída de la tasa de paro desde el 5% hasta el 4,9% y una creación de puestos de trabajo en la economía no agrícola de 160.000. Ello cotizaba ligeramente a la baja en Wall Street.

Divisas, deuda y materias primas

De la doble agenda a uno y otro lado del Atlántico se observó una caída del euro en comparación con el billete verde: la moneda única retrocedía un 0,3% respecto al billete verde, hasta el nivel de 1,1156 unidades.

En el mercado de deuda, caída de los intereses de los bonos: el rendimiento de los títulos alemanes a diez años bajaba desde el 0,14% hasta el 0,12%, su nivel más bajo en tres semanas. También a la baja la rentabilidad del bono americano: retrocedía desde el 1,84% hasta el 1,81%. Estabilidad, en cambio, para la deuda española, cuyo rendimiento se mantenía en el 1,49%.

Tampoco había que pasar por alto la evolución del crudo, teniendo en cuenta la reunión de la OPEP. El barril de Brent, de referencia en Europa, retrocedía un 0,26%, hasta los 49,59 dólares. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, caía más, un 1,73%, hasta los 48,16 dólares. De nuevo, el cártel petrolero en las mismas: mantiene sin cambios la producción después de que sus miembros hayan fracasado en su intento de establecer un techo a la producción. En lo que sí parecen estar de acuerdo es en que el mercado global de crudo ha mejorado.

El oro volvió a caer: al cierre, retrocedía un 0,12%, hasta los 1.211,57 dólares.