El FMI prevé que España rebaje el déficit público al 3% el próximo año y cumpla el objetivo

En su informe 'Monitor Fiscal', las estimaciones del FMI establecen para España un déficit este año del 3,9% y para el año que viene del 3%, aunque a partir de 2025 se elevaría ligeramente y se consolidaría en el 3,4% en los siguientes cuatro años, hasta 2028, que es cuando acaba el cuadro de previsiones del organismo que preside Kristalina Georgieva. El fondo asume que los ingresos representarán el 43,1% del PIB este año pero que en 2024 bajará su peso dos décimas hasta el 42,9% del PIB. A partir de 2026, la recaudación bajaría su peso al 41,2% del Producto Interior Bruto. En comparación con la media de la eurozona, la presión fiscal en España es inferior, ya que en la zona euro los ingresos suponen más del 46%. Alemanis, Francia, Italia, Dinamarca y Suecia, entre otros, tienen más recaudación que en España en peso sobre el PIB. En cuanto a los gastos, el Fondo considera que el Gobierno no conseguirá devolverlos a los niveles prepandemia: En 2019, el gasto público representaba el 42,3% del PIB; la epidemia de coronavirus y después la guerra de Ucrania, con su impacto negativo en el crecimiento económico, obligó a aprobar ayudas económicas en muchos casos de aplicación general, con lo que el gasto se disparó hasta representar el 51,9% del PIB en 2020 y el 50% en 2021. El año pasado y este se redujo al 47,1% del PIB y, según las previsiones del FMI, seguirá bajando su peso en el PIB en los próximos ejercicios, pero siempre estará al menos entre dos y tres puntos por encima del nivel prepandemia.

El FMI estima que las medidas de apoyo energético representan el 1% del PIB en España este año. Desde diversos organismos, como la Comisión Europea o la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) se ha advertido al Gobierno que para cumplir el objetivo de déficit el año que viene tendrá que eliminar las ayudas por la crisis energética o focalizarlas en colectivos vulnerables muy concretos. Las proyecciones del FMI recogen los desembolsos europeos en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

El Gobierno de Pedro Sánchez se comprometió con Bruselas a adelantar un año (a 2024) el cumplimiento del objetivo de déficit del 3% y de reducción de deuda pública (medida en porcentaje sobre el PIB) como figura en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. La reciente revisión al alza del PIB por parte del Instituto Nacional de Estadística (INE) ha supuesto un empujón para el logro de estos objetivos. El FMI también respalda que España logrará situar la deuda pública por debajo del 110% del PIB. En concreto, calcula que esta año la deuda pública bruta representará el 107,3% del PIB y bajará hasta el 104,7% del PIB el año que viene; en 2025 la reducción será de unas décimas hasta el 103,9% del PIB para dejarla situada en el 103,8% los ejercicios siguientes.

En su informe 'Perspectiva Económica Mundial', presentado el martes en Marrakech, el FMI mantiene a España como la gran economía desarrollada que más crecerá este año y el siguiente, con una expansión del 2,5% y del 1,7%, respectivamente. La economía española seguirá creciendo por encima del promedio de la zona euro, para la que el FMI contempla una expansión del 0,7% este año y del 1,2% el siguiente. A más largo plazo, las previsiones de la entidad contemplan una expansión de la economía española del 2,1% en 2025 y del 1,8% en 2026, mientras que un año después el crecimiento del PIB será del 1,7% y del 1,6% en el último año de la proyección.

El crecimiento de la economía española permitirá seguir reduciendo la tasa de paro, la mayor entre los países del euro, que se situará en el 11,8% en 2023, frente al 12,9% del año pasado, pasando al 11,3% en 2024 y situándose en torno al 11,1% en los ejercicio siguientes. Según el FMI, la cifra de ocupados seguirá creciendo en España este año (alcanzará los 20,73 millones) y el próximo (20,93 millones de ocupados, una cifra récord).

Por otro lado, el FMI anticipa que la tasa de inflación cerrará este año con promedio del 3,5%, para repuntar al 3,9% el próximo ejercicio, a partir de cuando la subida de precios se moderará, hasta el 2,1% en 2025 y en torno al 1,7% los siguientes años.